Después del Trofeo de Campeones, partido en el cual jugó por primera vez como titular, Echeverri expresó su decisión de no renovar el contrato con la entidad riverplatense que finaliza en diciembre de 2024. Ante esto, y ante la posibilidad de poder marcharse libre, River debía tomar una decisión al respecto, pero no estaba en los planes "colgarlo" sino negociar su transferencia y una cesión, para evitar que negociara como futuro jugador libre a partir del 1° de julio, aunque el propio pibe advirtió que no quería irse mal del club que lo formó. A final de cuentas, fue vendido.