La eliminación de Boca en la Copa Libertadores 2021 no quedó en el campo de juego. Una vez que el equipo de Miguel Russo cayó en los penales ante Atlético Mineiro y se dirigía hacia los vestuarios, se desató un escándalo entre los futbolistas de ambos clubes y la policía brasileña , que no dudó en disipar en varias ocasiones con gases lacrimógenos.
Después de varios minutos y enfrentamientos en distintas zonas del Mineirao, parecía volver a reinar la calma y la seguridad permitía la desconcentración del plantel azul y oro. Sin embargo, la noche fue muy larga para el conjunto de la Ribera: ocho integrantes de la delegación fueron imputados por los incidentes bajo los cargos de agresión y destrucción del patrimonio de la institución y debieron prestar declaración indagatoria en una comisaría. Ante esta situación, el resto del plantel decidió acompañar a los implicados a la comisaría.
Pero lo que se suponía que sería un mero trámite, se transformó en un nuevo destrato al equipo argentino: Boca pasó más de 12 horas en el destacamento policial, con los jugadores toda la noche dentro de un micro y sin la posiblidad de descansar de manera acorde tras haber disputado un partido de alto rendimiento. Tras perder el avión que iba a trasladarlo de vuelta a Buenos Aires en horas de la madrugada, la delegación recién pudo partir al aeropuerto a las 12 del mediodía y tomará el avión de regreso recién a las 14.
¿Quiénes fueron los imputados por los incidentes? Entre los jugadores se encuentran Marcos Rojo (se lo ve atacando a una persona de civil e incluso amenazando con un matafuego), Carlos Izquierdoz, Javier García, Sebastián Villa y Carlos Zambrano , el entrenador de arqueros, Fernando Gayoso , junto a los integrantes del Consejo de Fútbol, Jorge Bermúdez y Raúl Cascini, también involucrados en el episodio. Además, las autoridades brasileñas acusaron a Norberto Briasco, a pesar de que al delantero no se lo ve en ninguna imagen participando de los incidentes.