ENTREVISTA EXCLUSIVA
Ottavio Bianchi (Brescia, 1943) es el entrenador que más veces dirigió a Diego Armando Maradona. En total fueron 161 partidos oficiales con el Napoli que se tradujeron en el histórico doblete de 1986 y la UEFA de 1989, tres títulos que siguen constituyendo la etapa más gloriosa de la historia del club partenopeo que hoy recibirá por primera vez a un Leo Messi al que, según se desprende de las palabras de Bianchi en esta entrevista en exclusiva para Goal, el Barcelona no está sabiendo sacar todo su jugo futbolístico en los últimos años.
¿Qué se siente al ver que con el paso de los años su Napoli sigue siendo el mejor de todos los tiempos?
"Fui jugador del Napoli cuando también había muchísima calidad, jugué con Sívori, Altafini, Zoff, Guarneri o Sormani, todos grandísimos jugadores. Pero no teníamos ni la estructura ni la mentalidad de la victoria. Éramos capaces de ganar contra cualquier grande pero luego perdíamos contra cualquier equipo pequeño. No teníamos la mentalidad necesaria para ganar regularmente. Los equipos que la tienen no distinguen y van siempre al máximo contra todos los rivales. Eso fue lo primero que tuvimos que trabajar y debo decir que si pude hacerlo fue porque había jugado allí muchos años y conocía muy bien al club y a la afición".
La llegada de Maradona ayudó, sin duda, a la hora de forjar esta mentalidad. ¿Cuál era el secreto de aquel equipo, más allá de Maradona?
"La determinación. El año anterior a su llegada el Napoli había peleado por la permanencia. Con él las cosas empezaron a cambiar desde su primera temporada y ya en el segundo verano diseñamos un equipo pensando en estar arriba. Empezamos a trabajar de forma pragmática, sin tanta fantasía ni historias e impusimos la ley del trabajo. Si el fútbol es el deporte más bonito del mundo es porque las cualidades individuales se ponen al servicio de un colectivo que se potencia a partir de lo que potencia cada individuo".
¿Cómo se construyó aquel equipo, alrededor o al servicio de Maradona?
"Paso a paso. No se puede pensar en ganar cosas importantes si antes no se ha construido algo. El primer año nos pidieron estar en la parte alta de la clasificación y fuimos terceros. En el segundo logramos el doblete y si lo logramos fue porque incluso los que menos jugaban, los que lo hacían sobre todo en la Coppa, tenían tanta o más hambre de victoria que los titulares. En aquella Coppa disputamos trece partidos y ganamos los trece. Eso se logra cuando hay una perfecta comunión entre el césped y las gradas. El Napoli, que nunca había ganado nada importante, se veía con el mejor jugador del mundo y una generación con ganas de sacrificarse en el día a día, eso facilitó mucho las cosas".
¿Cuál era el peso de Maradona en ese grupo?
"En el vestuario y en el campo Diego era un chico excepcional. Cuando me preguntan si era difícil gestionar o dirigir a Maradona siempre digo lo mismo. Era más difícil gestionar a quien se creía Maradona sin serlo. Eso sí resultaba difícil y me sucedió muchas veces. Hay muchos jugadores que se creen más de lo que son. Pero Maradona no era solo lo futbolístico. Él jamás criticó en público o en el terreno de juego a un compañero por equivocarse. Hoy basta con encender el televisor y poner cualquier partido para ver cómo a la que alguien pierde un balón, alguno de sus propios compañeros se lamenta levantando los brazos. Eso Maradona no lo hizo jamás. De jugadores hay de muchos tipos. Como Maradona no hay tantos".
En breve su mas firme sucesor pisará por primera vez el templo de Maradona. ¿Es justa la comparación con Messi?
"Jugué con Sívori, un zurdo argentino impresionante, entrené a Diego y me hubiera encantado trabajar con Messi. Siempre que puedo le veo porque estoy enamorado de esta clase de jugadores que tienen el fútbol en la sangre. Pero son épocas distintas, es como cuando comparan a Diego, Cruyff y Messi. Sólo puedo decir que ha sido un placer verles a todos y cada uno en el terreno de juego. Por fortuna en cada época hemos tenido un fuera de serie de esta magnitud. Son jugadores tan buenos que pasa como con el arte. Te pueden gustar Matisse, Gauguin o Picasso, Beethoven, Mozart o el que sea, pero están tan fuera de los parámetros establecidos todos ellos que solo cabe esperar a que aparezca el siguiente en todas estas disciplinas".
Entiendo que, como sucede con el arte, no se puede decir cuál es el mejor sin tener en cuenta el gusto de cada uno.
"Es exactamente así. Son tan buenos que hacer clasificaciones y distinciones entre estos jugadores es poco generoso. No se puede clasificar a los mejores pintores o músicos porque cada uno vive en su época".
A Messi no le vemos últimamente tan feliz en el campo como en otras épocas. ¿Le parece que es más difícil de contentar que Maradona?
"No sé qué significa eso de contentar a una estrella. Leo en los periódicos que en el Barcelona hay problemas importantes y lo que sé es que esta clase de jugadores necesitan un ambiente muy particular para expresarse en toda su grandeza. Si se entristecen es mucho más difícil que rindan, aunque eso lo acusan más los brasileños. Tradicionalmente son jugadores con tanta fantasía que si hay algo que les inquieta no logran enseñar todo su fútbol".
¿Messi hubiera triunfado en el Napoli como hizo Maradona?
"Por supuesto que hubiera triunfado. Nápoles y el Napoli hubieran sido inolvidables para él como lo fueron para Diego. Es verdad que no hubiera podido tener una vida social como la que seguramente tenga en Barcelona porque hubiera sido, tanto él como su familia, el absoluto centro de atención en cada paso que diera".
¿Qué le pasa a este Napoli, que hasta ha tenido que cambiar de entrenador?
"El Napoli llevaba años jugando para ganar el campeonato. En ocasiones han jugado muy bien y llevaban años siendo competitivos. Todos esperábamos la temporada en la que aspiraran de verdad al título y con Ancelotti se había incluso hablado en público de intentar ganar el scudetto. Pero Nápoles es así. Hay momentos de gran exaltación pero, si los resultados no llegan, la descorazón también es gigante. Para responder a esa pregunta debería estar dentro del vestuario, sin embargo. Es un ambiente muy difícil, el de Napoli. Es muy distinto al que pueda haber en Barcelona, donde hay dos equipos y uno está acostumbrado a ganar y a pelear por los títulos. Aquí es diferente, solo hay un equipo y la ciudad entera se desvive por él, allí el fútbol es un hecho social. A veces no se sabe quién es más importante, si San Gennaro, el patrón de la ciudad, o San Diego (Maradona)".
Quizá ese carácter volcánico tenga que ver con la proximidad del Vesubio. ¿Qué le espera al Barcelona en el San Paolo?
"Nápoles es una fuente inagotable de fantasía, inteligencia, cultura y arte. Hay quien está acostumbrado a hablar de esta ciudad por la camorra y la mala vida pero Nápoles es muchísimo más que eso, es un foco de cultura y pasión excepcional y eso se notará seguro".
Lo digo porque a pesar de la irregularidad el Napoli ha logrado cargarse en el San Paolo tanto a la Juventus como al Liverpool esta temporada. ¿Podrá con el Barcelona de Messi?
"Lo cierto es que este Napoli tiene muy buenos jugadores y cuando eso sucede en competiciones de esta clase ante rivales de esta categoría la motivación viene sola. La trampa para el Barcelona estará detrás de la esquina, como les pasó a la Juve y al Liverpool. De todas formas, me parece que el Barcelona no goza de una gran salud en estos momentos. Los problemas institucionales se suelen notar en el terreno de juego y a Messi se le ve algo triste en el campo. Él solo no puede ganar como no podía Maradona, necesita estar rodeado por jugadores de gran nivel y por eso sus mejores años los dio cuando tenía a dos fenómenos como Xavi e Iniesta junto a él. Iniesta es el tipo de jugador ideal para cualquier equipo, es un jugador que lo tiene todo para ser el prototipo ideal de futbolista. Luego Messi es el talento puro pero Iniesta es todo lo deseable que puede llegar a ser un jugador. Por lo que leo creo que el Barcelona tiene problemas y si el Napoli, que no tiene nada que perder, es lo suficientemente hábil puede crearle serias dificultades a este rival".




