Lionel Messi fue un objetivo por años del Inter Miami CF de la MLS de Estados Unidos. El conjunto de la Florida tenía en mente la contratación del astro argentino desde el capítulo del 'Burofax' con el Barcelona, sin embargo, el deseo de continuar en Europa fue mayor y fichó con el Paris Saint Germain de Francia.
Tanto Jorge Mas como David Beckham tenían la ilusión que el Inter Miami fuera la franquicia más atractiva en los Estados Unidos. Por ello, se enfocaron en el mercado latino para fichar a una de las perlas del futbol mexicano en su momento: Rodolfo Pizarro, además de mirar al Viejo Continente y contratar a figuras como Gonzalo Higuaín y Blaise Matuidi, quienes se retiraron con Miami.
En busca de la contratación de Messi, el plan fue atractivo, algo que vino seduciendo a Leo: calidad de vida, importancia por parte de patrocinadores y actores clave para MLS como patrocinadores, así como una estabilidad en la Unión Americana de cara a la Copa América y el Mundial United 2026 en Estados Unidos, México y Canadá.
"Yo siempre tuve la ilusión de poder vivir la experiencia de vivir en Estados Unidos y vivir lo que esa Liga y lo que es la vida allá. Si pasa o no, después me gustaría volver a vivir a Barcelona", dijo Messi en el 2020 a Jordi Évole. Dichas declaraciones pusieron a trabajar a Mas desde su despacho en Fort Lauderdale.
Por su parte, Beckham también hizo su labor, pese a no compartir colores del futbol de España. Mientras David es un identificado con el Real Madrid, Leo es una leyenda del Barcelona. El inglés tuvo diferentes acercamientos con el entorno de Messi, donde dio pistas de la importancia de aterrizar en el Inter Miami, reciente franquicia de expansión.
Próximo partido
"Tiene que ser Messi. Amo a Messi. Por muchas razones, lo amo porque es un gran jugador, tiene una gran personalidad, es una gran persona. Creo que lo que todos aman de él es cómo juega a la pelota, lo hace con pasión, juega de una forma muy libre. Amo ver jugadores así", dijo Beckham hace unos meses a Vanessa Huppenkothen de ESPN.
Los astros continuaron alineándose cuando se conoció que Messi había adquirido propiedades en Miami, además del gusto de su familia por vivir en los Estados Unidos. De ahí fue maquilar un proyecto de estabilidad y alejarlo de la presión que le implicaba su momento futbolístico, además de convertirse en imagen de una de las ligas con mayor proyección, en constante evolución y del interés de figuras, quienes no la consideran más como una "liga de retiro".
Una vez que se conoció que Leo no jugaría más con el PSG, se dieron los primeros acercamientos, aunque se pensaba que no tendrían oportunidad de contratarlo pues había una oferta interesante desde Arabia Saudita, donde recién aterrizó Karim Benzemá. El argentino era seducido para ser imagen de la candidatura para el Mundial del 2030.
Major League Soccer contó con el respaldo de la marca adidas y Apple TV, dueña de los derechos de transmisión de MLS a nivel global y el final de la historia fue sumamente favorable.
A Leo se le ofrecieron 40 millones de dòlares por temporada, parte de las ganancias por derechos en televisión y ganancias de adidas, una opción prioritaria para hacerse de una franquicia de expansión una vez que decida poner fin a su carrera, ingresos por derechos de tv y la prioridad para negocios en Miami. Una cifra menor a la de empresarios árabes, pero que sentenciaron su presente: Leo es nuevo jugador de Inter Miami, al menos por los próximos tres años.