Atlético Nacional ganó y respiró ante un Pasto batallador

Estaba obligado a ganar, para no solo empezar a sumar en la tabla, sino para que su propio ambiente mejorará después de un inicio de semestre desastroso. Lo logró, con algo de angustia, pero también con méritos.

Tres goles de buena factura, que ratificaron un buen desempeño ofensivo del equipo que los buscó con insistencia, fue un justo premio para los pocos más de 17.000 hinchas que desafiaron la lluvia para acompañar.

Tanto con Jarlan como con Guzmán completando el ataque junto a Andrade, Pabón, Mantilla y Duque, Nacional luchó y consiguió rédito. Se vio un equipo más suelto, con más variantes, fluidez y posibilidades de vulnerar el arco. También hubo actitud y compromiso.

El punto flojo fue, nuevamente, la defensa. Román y Angulo fueron titulares, con ambos siendo más aportantes en ataque que en defensa. El juego aéreo volvió a generar algo de drama y sufrimiento, que sumado al descuento pastuso y una ráfaga de ataques, opacaron levante el triunfo.

Nacional ganó y respiró. Herrera compró algunos créditos adicionales, tal vez los suficientes para tener los partidos necesarios que le permitan levantar al equipo, seguir sumando puntos e intentar ir por mucho más en el semestre. No es fácil, pero superó a un Pasto batallador y que en cierta medida fue un examen emocional para un plantel que busca salir del fango.

Anuncios