Cuando Emma Hayes se despidió como entrenadora del Chelsea en mayo pasado, habiendo llevado a las Blues a su quinto título consecutivo de la Women's Super League, bromeó diciendo que llegaría a la final de los Juegos Olímpicos unas semanas más tarde, en su primer gran torneo al mando de la selección nacional de mujeres de Estados Unidos. Sin embargo, su bola de cristal no reveló quién sería su rival.
"Nos vemos en algún momento, tal vez en la final por la medalla de oro olímpica. Tengo que ir y j*der a las españolas en algún momento", dijo en la sala de conferencias de prensa de Old Trafford al despedirse de los medios ingleses, refiriéndose al hecho de que el campeón de España, el Barcelona, había aplastado el sueño europeo de su Chelsea más de una vez.
Pero cuando Hayes salga al Parc des Princes el sábado para el partido por la medalla de oro, no tendrá esa pequeña oportunidad de venganza, ya que no será España quien se enfrente a Estados Unidos. No, La Roja luchará por la medalla de bronce contra Alemania el viernes en el Stade de Lyon, después de una sorprendente derrota por 4-2 ante Brasil en las semifinales.
Siendo campeonas del mundo, título que respaldaron al ganar la UEFA Nations League en febrero, teniendo talentos únicos como Alexia Putellas o Aitana Bonmati, ganadoras de los últimos tres Balones de Oro, España era la clara favorita para ganar el oro olímpico este verano. ¿Qué salió mal para dejar a este equipo lleno de estrellas luchando por la posición más baja en el podio?