Lo que hasta ayer parecía un sueño imposible en este mes de enero se está convirtiendo en una realidad: Dusan Vlahovic, a la Juventus. El nombre de los nombres, en los compases de cierre del mercado de invierno, una clara muestra de como la 'vecchia signora' (incluso en los momentos más complicados) siempre pretende mejorar.
Así es: el delantero serbio está a un paso de aterrizar en la Juve. Hay acuerdo con la Fiorentina: 75 millones de euros. Cinco más de lo que se desprende de las palabras de Daniele Pradè (entrevistado en las últimas horas por Sportitalia), los famosos 70 millones sin compensación técnica. Una misión que, a pesar de las dificultades económicas también ligadas al período actual, no asustó a los dirigentes bianconeri. Quien, de hecho, entendieron que asegurar a Vlahovic ahora supondría un salto de calidad y de cara al futuro. En definitiva, anticipar los tiempos para conseguir, apretando el acelerador, un puesto entre los cuatro primeros.
En los episodios anteriores, el director general Maurizio Arrivabene definió como "algo obligatorio" la clasificación para la próxima edición de la Champions League. El fracaso está prohibido, incluso y sobre todo por un tema de continuidad del negocio. Vlahovic ya había dado su sí. Le espera un contrato plurianual por valor de más de 7 millones netos anuales, una cifra que refleja plenamente la evolución propuesta por el ex del Partizan de Belgrado. Y si en Florencia no se lo han tomado bien (eufemismo), los fans de la Juventus esperan impacientes la fumata blanquinegra. Lo cual, ahora mismo, podría ser cuestión de horas.
Al mismo tiempo, atención a Álvaro Morata. Con la importante oferta de la Juventus por Vlahovic, la cual podría ejecutarse en cuestión de horas, el delantero español podría convertirse en nuevo jugador del Barcelona. No es casualidad que ayer aterrizaran en Milán los representantes del delantero español: todos esperando a la Juve, a la Fiorentina y a Vlahovic. Horas calientes.