OPINIÓN
Apenas es la segunda jornada de La Liga y Zinedine Zidane tiene ya un puzzle de los complicados para recibir al Valencia este domingo. Con Sergio Ramos sancionado, más Raphael Varane y Jesús Vallejo lesionados, el único central disponible que tiene el Real Madrid es Nacho Fernández. Y el caso es que el defensa alcalaíno es ciertamente infalible. Pero de ahí a poder multiplicarse y ocupar dos posiciones, hay un buen trecho…
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Eso sí, ya en serio, que no falte Nacho Fernández esta temporada. Porque la situación de este domingo amenaza con volver a repetirse. Es difícil que coincidan de baja los tres centrales, cierto, pero es muy fácil tanto que Sergio Ramos vuelva a estar sancionado, como que Varane y Vallejo vuelvan a estar lesionados. Es el talón de Aquiles de estos tres jugadores, que por otra parte son grandes defensores -¡qué decir de Sergio Ramos!-. Pero además de eso, también hay que ser regular y fiable. Dos capítulos donde Nacho puede barrer a Vallejo, a Varane, y a casi cualquier futbolista que le pongan en el otro lado de la balanza. Lo dice todo que no haya sufrido ninguna lesión desde infantiles.
El año pasado, con Pepe ausente durante casi toda la temporada, y Varane lidiando con sus molestias físicas, Nacho aprovechó para consolidarse ante los ojos de todo el mundo como el defensa que siempre fue, pero que nunca antes le dejaron mostrar. Un zaguero de categoría mundial. Este curso, con tres nuevos como Achraf, Theo y Vallejo en la línea de retaguardia, a buen seguro que Nacho volverá a ser fundamental. Y que no le dé por faltar, por el bien del Real Madrid.
