Una vez más el Deportes Tolima ha conseguido bajar la estrella de la liga colombiana y ha bordado la tercera para su escudo, en esta ocasión dejando en el camino a un Millonarios que se había consolidado como favorito gracias a sus buenas actuaciones desde que ingresó en el grupo de los 8 y al nivel con el que se presentó en semifinales ante Junior.
La ida parecía favorecer a los Embajadores, que con un en pate de oro en Ibagué, llegaban con relativa comodidad al encuentro definitivo, en su ciudad y en su cancha, además llevándose la ventaja muy temprano; Tolima tenía todo en contra, pero también tenía su amor propio y las ganas de que su leyenda como 'Matagigantes' sumara un nuevo capítulo.
Vale la pena recordar que el Pijao ya había conseguido la épica en 2003 ante un Deportivo Cali que tenía entre sus estrellas a un brillante Mayer Candelo, que poco pudo hacer para que el Vinotinto y oro se quedará con la primera estrella de su historia luego de dejar en el camino a rivales como Junior y Atlético Nacional, para luego definir todo de manera espectacular desde los 12 pasos, comenzando a escribir su historia ante los grandes de Colombia.
Años más tarde y bajo el comando de Alberto Gamero, el Tolima conseguiría su segundo título y tal vez uno de los más sonados, pues la final la disputo ante el prestigioso Atlético Nacional que regresaba a disputar una final después de un par de años de ganar su segunda Copa Libertadores, fue entonces cuando un Pijao sin complejos le arrebató la conquista número 17 al Verdolaga para seguir escribiendo su leyenda.
Ahora ha dejado con las manos vacías a Millonarios, el segundo equipo con más títulos en Colombia, lo ha logrado con trabajo duro, con una base de jugadores que se comprometen de comienzo a fin con el equipo, un cuerpo técnico serio, una hinchada que sigue creciendo y un fútbol que sabe de resistencia y perseverancia a la hora de ir por los 'Gigantes'.
