Ayer, al borde de la medianoche, Juan Ignacio García Ochoa avanzaba en Marca una noticia que ha podido confirmar Goal: hay muchas posibilidades de que Eden Hazard (30 años) vuelva a ser operado de un tobillo, el derecho, por el que ya ha sido intervenido en dos ocasiones en su carrera. La publicación surgía horas después de que se conociese la nueva lesión muscular del atacante, en el psoas.
Personas cercanas al caso explican a Goal que se ha aceptado mayoritariamente la hipótesis de que la placa que se le colocó en 2017 y se le tocó en 2020 al belga tras la patada en noviembre de 2019 de Meunier es el origen de sus problemas. Hay dos motivos para ello, una incomodidad y un dolor en la zona que va y viene, que no termina de irse, y las consecuencias psicológicas derivadas de ello. Hazard no apoya como debería ni ha recuperado la confianza en su buen estado.
Sin embargo, todavía no se ha tomado la decisión definitiva. Estos próximos días serán clave para ello, con algunos detalles ya hablados: se piensa en que, como en 2020, el jugador viaje a la Carrell Clinic de Dallas y se ponga en manos del mismo doctor que entonces, Eugene Curry. A Texas le acompañaron un año atrás su padre, Thierry, y el jefe del departamento médico del club, Niko Mihic. Serán los profesionales de la entidad los que lleven la voz cantante para determinar los pormenores de este proceso.
Una cuestión de salud
El Real Madrid y Hazard no piensan ahora en tiempos de baja o fechas de regreso. La tercera visita al quirófano supondría el adiós a la temporada y casi a la Eurocopa, un torneo visto como la gran oportunidad de la Generación de Oro de Bélgica. Pero nada de eso importa en el primer plano en estos momentos. El principal y único objetivo es mejorar su salud y salvar la carrera del fichaje más caro de la historia blanca, que sea capaz de volver a vivir sin molestias y desarrollar así su profesión.
Zidane, seguramente su mayor defensor, dio la cara por él y por los doctores madridistas ayer en rueda de prensa: "No creo que haya un problema, aquí tenemos a gente muy competente. Vamos a buscar qué está pasando, pero ahora es algo inexplicable. Está la pretemporada, la acumulación de partidos, la cabeza... A los aficionados les digo que esperen, sabemos qué jugador es".




