Cuando Boca vendió a Darío Benedetto a Olympique de Marsella, la lista de nombres que circularon por los medios como posibles reemplazantes del Pipa fue kilométrica. Entre opciones viables, alternativas delirantes y propuestas recibidas, finalmente quien terminó llegando al Xeneize fue Franco Soldano, que no figuraba entre los primeros delanteros apuntados. Sin embargo, el refuerzo pudo haber sido otro: Franco Di Santo contó que estuvo muy cerca de sumarse al club de la Ribera.
"Hubo un montón de posibilidades de llegar al fútbol argentino. La más grande fue de Boca, en agosto del año pasado", reveló el atacante de 30 años, que desarrolló toda su carrera profesional en el exterior. Incluso, en aquel momento el mendocino llegó a manifestar públicamente su deseo de ponerse la azul y oro, pero finalmente terminó recalando en Atlético Mineiro.
En diálogo con el diario Olé, Di Santo explicó: "Lo de Boca no se dio por diferentes motivos. Y justo en ese momento me salió la chance de venir a Mineiro, un club grande de Sudamérica, y no lo dudé".
