Dries Mertens, delantero del Napoli, habría estado repartiendo pizzas a los desamparados después del encuentro en Turín el pasado mes de diciembre.
Según Il Corriere della Sera, el futbolista belga llamó a uno de sus amigos más cercanos a su vuelta a la ciudad y le sugirió que comprase algo de comida para los más necesitados.
Ambos se dirigieron a las calles de Nápoles, con el jugador del club napolitano portando una gorra, gafas y una gran bufanda para evitar ser reconocido, y compraron varias pizzas margarita.
No es la primera vez que Mertens se convierte en protagonista de acciones solidarias; son habituales sus visitas a los hospitales o sus donaciones de ropa para los niños pobres.
Su esposa Katrin también es muy activa en estos términos y consiguió salvar de la quiebra a un refugio canino que inevitablemente hubiera cerrado sin su ayuda.


