El Sevilla cosechó ante el Granada su primera derrota de la temporada 2021-2022. El equipo de Julen Lopetegui venía dejando malas sensaciones en sus últimos partidos como visitante que finalmente se han acabado traduciendo en una pobre actuación en Los Cármenes que acrecienta sus dudas y dio aire a un equipo de Robert Moreno que hace sólo unas horas parecía desahuciado.
El conjunto sevillista fue víctima de sus propios errores individuales pero también del planteamiento de un técnico que reincidió en un plan que no le venía funcionando. La inclusión en el once de Rakitic y Suso volvió a imprimir al fútbol del Sevilla de un ritmo muy bajo y en el que la posesión parecía más un arma defensiva que un argumento para hacer daño al rival. Sin Ocampos, sorpredentemente en el banquillo, y En Nesyri, lesionado, al Sevilla le faltaba velocidad y sorpresa en ataque.
El guión de controlar la posesión y al rival hasta encontrar un zarpazo que acabara en gol no es nuevo en el Sevilla y es un plan muy habitual en la era Lopetegui, especialmente fuera de casa. Sin embargo, el éxito de esa propuesta está intimamente relacionado con rozar la perfección defensiva. En el momento en el que aparece un error individual o colectivo aparece el riesgo de ponerse por detrás en el marcador y tener que dar un giro de 360 grados al planteamiento. En Granada bastó con que Diego Carlos despejara mal para que Rochina castigara con el tanto que a la postre fue definitivo.
Sólo una victoria fuera y ninguna remontada
Como ocurrió en Alemania ante al Wolfsburgo o en Elche, Lopetegui reaccionó cambiando el plan e introduciendo más argumentos ofensivos. No obstante, aunque acabó llegando alguna ocasión que pudo valer el empate, los nervios fueron atenazando a un equipo que sabe que la expectativas están altísimas y que sabe que los tropiezos ante equipos de la zona baja acaban siendo una losa demasiado pesada cuando se aspira a lo más alto.
Sin ir más lejos, el Sevilla no ha ganado esta temporada ninguno de los partidos que empezó perdiendo, empató ante Elche, Salzburgo y Wolfsburgo y perdió ante el Granada, mientras que ganó todos y cada uno de los encuentros en los que se puso por delante demostrando que, pese al irreguar comienzo de temporada, sigue siendo un equipo más que fiable a nivel defensivo. Además, fuera de casa es donde más fiabilidad ha perdido y sólo ha ganado en una de las cinco salidas que acumula este curso.
Esta dinámica, muy relacionada con la forma de encarar los partidos que propone Lopetegui, se arrastra desde la temporada pasada. El Sevilla en LaLiga 2020-2021 sólo remontó ante el Cádiz y la Real Sociedad, es decir 2 de los 10 partidos en los que empezó perdiendo. También habría que sumar dos remontadas ante el Celta, que empezó perdiendo en la ida y en la vuelta, dio la vuelta al marcador pero el Sevilla volvió a adelantarse para llevarse los tres puntos.
Los datos y la amplitud de la plantilla que se ha confeccionado invitan a Lopetegui a buscar soluciones para cambiar esta tendencia y buscar un plan algo más ofensivo en determinados encuentros que podrían pasar incluso por variar su sistema y usar más habitualmente dos delanteros desde el minuto 1 y no sólo como un recurso cuando el plan inicial, que también tantas victorias y éxitos ha dado estos años, se tuerza,.




