McTominay ha abrazado la vida en Italia, y los aficionados lo han aceptado como uno de los suyos. Un santuario para el escocés ha sido construido en Nápoles y se ha convertido en un favorito de los aficionados en una fenomenal temporada de debut en la que ha marcado 12 goles y ha registrado seis asistencias en la Serie A. Sus actuaciones, junto con su compañero exiliado del United, Lukaku, han sido cruciales para revitalizar al Napoli y llevarlos al título.