Javier Mascherano no se mezcla en los entrenamientos estos días.
Hubo tiempos pasados, cuando el nuevo entrenador de Inter Miami estaba allí, en Rondos con Lionel Messi, Sergio Busquets, Jordi Alba y Luis Suárez como jugador del Barcelona entre 2010-18. Allí estaba, haciéndose viral por un desafortunado caño aquí y allá, y mandando a la cuarteta por el campo de entrenamiento catalán en Barcelona. Y los fines de semana, jugaba detrás de ellos como uno de los legendarios mediocampistas defensivos del club, gritando y entrando fuerte desde el fondo mientras el famoso lado Blaugrana dominaba tanto La Liga como Europa.
Pero ya no más.
"Me fui hace mucho tiempo como jugador de fútbol", dijo Mascherano a GOAL. "Ahora solo me estoy enfocando en entrenar, y enfocándome en los jugadores".
Y ese es un trabajo importante para asumir. Mascherano, como se ha documentado bien, tiene una experiencia limitada como entrenador principal. Nunca ha tomado las riendas de ningún club profesional a ningún nivel. Su currículum consiste en varios trabajos en la configuración juvenil de Argentina, respaldado por una carrera profesional de 20 años que incluyó cuatro títulos de La Liga, dos Ligas de Campeones y un período como vicecapitán del Barcelona.
Este papel en particular, sin embargo, es único. No solo Mascherano está asumiendo su primer trabajo, sino que también es el hombre en la banda del equipo más visto del fútbol americano. Y tendrá que hacerlo todo mientras controla el ruido alrededor de los cuatro futbolistas con los que solía entrenar todos los días.





