En un comunicado, la CONMEBOL informó:
"El Comité Disciplinario de CONMEBOL ha abierto una investigación para entender la secuencia de eventos y las responsabilidades de los involucrados en los actos de violencia que ocurrieron al final del partido entre las selecciones nacionales de Uruguay y Colombia.
En vísperas de la final de la Copa América, queremos reafirmar y advertir que no se tolerará ninguna acción que empañe esta fiesta global del fútbol, que involucra tanto a los jugadores como a los aficionados presentes en el estadio, y que será vista por cientos de millones de espectadores en todo el mundo.
Es inaceptable que un incidente como este convierta la pasión en violencia. Por lo tanto, no se tolerará ningún comportamiento que perjudique la competencia deportiva y el espectáculo más hermoso del mundo, que pertenece a toda la familia del fútbol."