La decisión de Lewandowski marca el fin de una breve pero muy publicitada disputa que había generado incertidumbre sobre su futuro internacional. La decisión nocturna de Probierz de entregar la capitanía a Piotr Zielinski llevó al delantero de 36 años a anunciar un autoexilio del equipo nacional. Ese conflicto concluyó cuando Probierz renunció, allanando el camino para que Urban iniciara el contacto. Urban expresó públicamente su deseo de traer de vuelta a Lewandowski, y ahora se dice que el delantero regresará con efecto inmediato.