El Real Madrid apunta a Erling Haaland como delantero, mientras Arabia Saudita intensifica su interés por Vinícius Júnior

La creciente influencia y poder adquisitivo de Arabia Saudita ha revolucionado el mundo del fútbol en los últimos años, con varios jugadores de renombre trasladándose al Medio Oriente. Ahora, Vinícius Júnior parece ser uno de sus objetivos prioritarios, con clubes saudíes soñando con concretar una de sus transferencias más ambiciosas hasta la fecha. El brasileño ya ha rechazado una oferta económica descomunal de Arabia Saudita, que se estima en alrededor de 1.000 millones de euros por un contrato de cinco años.

A pesar de haber sido rechazada en su primer intento, el periodista Florian Plettenberg ha informado que la operación está lejos de ser descartada. Los dirigentes saudíes siguen comprometidos con la negociación, persiguiendo lo que se ha calificado como un acuerdo de "escala sin precedentes", el cual podría marcar nuevos récords tanto en tarifas de transferencia como en salarios de jugadores. Si Vinícius finalmente acepta la oferta este verano, se informa que el Real Madrid tiene listo un Plan B: ir a por Haaland del Manchester City. El destacado delantero noruego ha sido un objetivo a largo plazo para el club blanco, aunque cualquier movimiento había parecido innecesario con Vinícius y Mbappé en el equipo.

Si Vinícius se marcha, Haaland encajaría de manera natural en el puesto de delantero centro, liberando espacio para que Mbappé ocupe su posición favorita por la izquierda, que ha preferido a lo largo de su carrera. Esa versatilidad podría hacer que un trío Haaland-Mbappé-Rodrygo no solo sea viable, sino también una pesadilla para cualquier rival, formando posiblemente una de las alineaciones ofensivas más temibles que el fútbol haya visto.

Las esperanzas del Real Madrid de fichar a Haaland, sin embargo, no serán nada fáciles. A principios de 2025, el delantero extendió su contrato con el Manchester City, asegurando su compromiso con los campeones de la Premier League hasta 2034. Lo más importante es que, según se informa, el nuevo contrato no incluye cláusula de rescisión, lo que elimina una vía común de escape para clubes como el Madrid. Sin esta opción, el club merengue tendría que negociar directamente con el City, que no estará dispuesto a dejar ir a su estrella sin una dura negociación y un precio elevado.