El próximo entrenador de Inglaterra: Pep Guardiola, Thomas Tuchel y los nueve candidatos para convertirse en el nuevo seleccionador

Gerrard es el cuarto jugador con más partidos en toda la historia de Inglaterra y probablemente el centrocampista más completo que haya vestido la camiseta blanca. El respeto estaría garantizado solo por su reputación, mientras que la experiencia en grandes torneos que Gerrard puede transmitir es potencialmente invaluable.

Pero la leyenda del Liverpool todavía no ha logrado probar si tiene lo que se necesita para ser un entrenador de élite. Aparte de un título de la Premiership escocesa con el Rangers, sus primeros seis años en los banquillos han sido una gran decepción.Gerrard fracasó de manera espectacular en el Aston Villa y su reputación solo ha continuado cayendo desde su traslado al club saudí Al-Ettifaq.

En verdad, es preocupante que Gerrard haya sido mencionado como una opción para Inglaterra: ni siquiera está cerca de mostrarse preparado y sería prudente que regresara a Europa si quiere construir una reputación que lo haga merecedor de una oportunidad que, por sus galones como futbolista, merecería.

Mourinho afirmó recientemente que ha rechazado el banquillo de Inglaterra en dos ocasiones, cuando era reverenciado como uno de los mejores entrenadores del mundo. El portugués también insistió en que solo considerará fichar por una selección cuando esté "viejo y cansado", mientras que asumió un nuevo desafío con el Fenerbahçe en el verano. Sin embargo, puede que se vea obligado a modificar su postura en un futuro cercano.

Ninguno de los grandes clubes de Europa está atraído por Mourinho en este momento de su carrera. Su metodología para motivar a su plantilla es más agotadora que inspiradora en estos días, mientras que sus tácticas parecieron estar algo desactualizadas en sus pasos por el Manchester United, el Tottenham y la Roma.

Pero eso no significa que el 'Special One' esté acabado. Las habilidades de Mourinho parecen, de hecho, ideales para el escenario internacional: el portugués sabe exactamente lo que se necesita para ganar torneos y cómo motivar a sus jugadores para partidos únicos. Conseguir el éxito con Inglaterra también repararía su reputación dañada, aunque es poco probable que la FA lo considere seriamente de nuevo luego de dos desplantes.

Al igual que Gerrard, Lampard es un futbolista que fue una vez grandioso y que ha encontrado la transición hacia los banquillos mucho más difícil de lo que jamás hubiera imaginado. Le fue bien en su primer rol en Derby, pero se lanzó al Chelsea demasiado pronto y estuvo mal preparado para lidiar con el caos tras bastidores en Everton.

Después de ser despedido por ambos clubes, Lampard cayó de pie con un regreso a Stamford Bridge como entrenador interino, pero también desperdició esa oportunidad cuando los Blues terminaron en la parte baja de la tabla en 2022-23. Lampard ha estado sin trabajo desde entonces, y queda por ver si todavía tiene el mismo hambre de éxito como entrenador.

Sin embargo, el panorama no es del todo malo para él. Es un brillante comunicador y tiene un fuerte historial en el desarrollo de jugadores jóvenes, destacándose en la formación de Mason Mount, Reece James y Tammy Abraham en el Chelsea. Inglaterra estaría asumiendo un gran riesgo si decidiera recurrir a Lampard, pero tendría más sentido que optar por Gerrard, y podría sorprender a todos.

McKenna ha recorrido un largo camino desde que tomó la valiente decisión de dejar el cuerpo técnico del Manchester United y salir por su cuenta. Tomó las riendas del Ipswich en 2021 y desde entonces ha guiado a los Tractor Boys desde la League One hasta la Premier League, ganando muchos admiradores por su estilo de juego innovador en el proceso.

Se dice que el United, el Chelsea, el Tottenham y el Brighton tuvieron la intención de contratar a McKenna el último verano, pero el norirlandés finalmente decidió firmar un nuevo contrato de cuatro años en Portman Road. El inicio de la aventura del Ipswich en la Primera División no comenzó de la mejor manera, sin victorias en las primeras siete jornadas de la temporada pero, según The Sun, McKenna sigue estando en la lista corta de Inglaterra para reemplazar a Carsley.

Se dice que el director técnico de la FA, John McDermott, es un gran admirador del norirlandés, con quien trabajó cuando era entrenador juvenil en Tottenham. McKenna es un entrenador progresista capaz de crear un ambiente en el vestuario basado en la confianza y también le daría al equipo una identidad clara, algo que faltaba bajo Southgate.

Potter ha estado buscando trabajo desde que fue despedido sin piedad por el Chelsea en abril de 2023, después de menos de siete meses en el banquillo de Stamford Bridge. Es justo decir que no cumplió con las expectativas en el oeste de Londres, pero gran parte de la crítica que se le dirigió fue dura, ya que los problemas de los Blues provienen de la mala toma de decisiones de la gestión de Todd Boehly.

En su rol anterior en Brighton, Potter demostró ser un técnico astuto que favorece el fútbol ofensivo y anima a sus jugadores a arriesgar. Es lo opuesto a Southgate en muchos aspectos: un entrenador meticuloso y reflexivo con una visión moderna del juego que se adaptaría a Inglaterra.

Cuando se le preguntó sobre la posibilidad de suceder a Southgate en el Monday Night Football de Sky Sports, Potter admitió que está "abierto a cualquier cosa", lo que seguramente no habrá pasado desapercibido para la FA. Los aficionados pueden tardar un tiempo en aceptarle después de su catastrófica etapa en el Chelsea, pero tiene todas las herramientas para llevar a los Tres Leones hacia adelante.

Howe hizo milagros en Bournemouth durante su período de ocho años en el Vitality Stadium, lo que llevó a que se convirtiera en el objetivo principal del Newcastle tras la compra del club por parte del fondo soberano de Arabia Saudita en octubre de 2021. Las Urracas regresaron a la Champions League por primera vez en 20 años en la primera temporada completa de Howe al mando, lo que consolidó el estatus del inglés como uno de los entrenadores jóvenes más prometedores de Europa.

Sin embargo, 17 meses después, las cosas no se ven tan bien para Howe en St James' Park. El entrenador de 46 años estaba frustrado, según reportes, por la falta de fichajes durante el verano, y ha perdido a una aliada clave tras la salida de Amanda Staveley como copropietaria del club.

Howe aún tiene contrato hasta 2027, por lo que Inglaterra tendría que pagar una considerable compensación para lograr que se fuera del Newcastle, pero podría ser una inversión que valga la pena. Es un entrenador accesible con habilidad para mejorar a los jugadores y capaz de ofrecer un fútbol entretenido, pero que tampoco tiene miedo de adoptar un enfoque más astuto cuando es necesario. La adaptabilidad es lo que hace a Howe único, y parece que el banquillo de los Tres Leones le llegará tarde o temprano porque constantemente se esfuerza por alcanzar los estándares más altos posibles.

Según Sport Bild, Tuchel está "negociando" con la FA para convertirse en el nuevo entrenador permanente de Inglaterra. Sin embargo, The Independent ha afirmado que aquella primicia del periódico alemán fue una táctica impulsada por el entorno de Tuchel para presionar al Manchester United, que supuestamente le está considerando como un posible reemplazo para Erik ten Hag tras un mal comienzo de la campaña 2024-25.

Cualquiera que sea la verdad de la situación, no hay duda de que Tuchel sería una mejora en comparación con Southgate y Carsley para Inglaterra. Sería una locura si la FA no estuviera considerando seriamente al alemán, porque es raro que un entrenador de su categoría esté disponible como agente libre.

El germano superó las expectativas en sus etapas con el Borussia Dortmund, el Paris Saint-Germain y el Chelsea mientras se mantenía fiel a una filosofía basada en la posesión que hizo que todos esos equipos fueran extremadamente difíciles de enfrentar. En el Bayern no tuvo el mismo éxito y a veces se le vio demasiado dominado por sus emociones, pero Tuchel sigue siendo uno de los mejores en el ambiente y seguramente disfrutaría el desafío de intentar transformar la suerte de Inglaterra.

Klopp aceptó el puesto como el nuevo jefe global de fútbol del grupo Red Bull la semana pasada, menos de cinco meses después de dejar el Liverpool. El popular alemán comenzará oficialmente a trabajar en su nuevo rol a principios de 2025 y parece estar realmente decidido a dejar atrás los banquillos: "Hace unos meses dije que no me veo más en la línea de banda y eso sigue siendo cierto", dijo al confirmar la noticia en Instagram.

Klopp admitió que le estaba faltando "energía" en su última temporada en Anfield, pero su lenguaje corporal durante los partidos decía lo contrario. El hombre de 57 años tiene una pasión profundamente arraigada por el juego y llegará un momento en que será tentado a regresar al ruedo.

Klopp ha sido mencionado durante mucho tiempo como un potencial seleccionador de Inglaterra y eso no cambiará ahora que está en Red Bull. Conoce el fútbol inglés a la perfección después de nueve años con el Liverpool y tiene el carisma y la fortaleza interior para lidiar con la presión del trabajo. Los aficionados aún pueden soñar con ver a Inglaterra jugar al estilo de fútbol "heavy metal" del alemán en algún momento, incluso si no es el próximo en asumir el cargo.

Que Guardiola tome el puesto de Southgate es el escenario soñado para Inglaterra. El entrenador del Manchester City ha admitido que desea trabajar en alguna selección eventualmente y su contrato en el Etihad expirará el próximo verano. Y aunque sería una apuesta arriesgada por parte de la FA esperar ocho meses para designar un entrenador (con el inicio de las Eliminatorias para el Mundial 2026 previsto para marzo), las recompensas podrían ser enormes.

El éxito no está garantizado con ningún entrenador, como Inglaterra ha aprendido por las malas, pero Guardiola es lo más cercano que hay a una apuesta segura. Es un ganador en serie que ha logrado sacar el máximo provecho de los mejores jugadores del mundo durante más de 16 años, mientras empuja constantemente los límites de la excelencia. Puede que nunca haya una mejor oportunidad para que Inglaterra incorpore a Pep y sería un descuido imperdonable si la FA no levantara al menos el teléfono para hablarle de su proyecto.