La ventana de mercado desquicia al FC Barcelona: ni ficha a Nico Williams ni vende a Arabia Saudí

Las finanzas del Barça están, sin duda, en mejor estado que antes. Era difícil seguirle la pista a todos los movimientos que Laporta estaba haciendo hace dos años. De hecho, vendió partes futuras de ingresos por inyecciones de efectivo a corto plazo, manteniendo efectivamente vivo al club mediante acuerdos arriesgados. Al hacerlo, puso fe en la marca Barça, apostando a que el crecimiento orgánico y el éxito en el campo serían suficientes para compensar la diferencia a largo plazo. En otras palabras: el Barça era demasiado grande para fracasar. Y en cierto sentido, han evitado la crisis.

Publicaron un beneficio neto durante el último año financiero, y pudieron fichar a Víctor Roque en enero, aunque de manera equivocada. Sin embargo, siguen estando muy por debajo del umbral requerido para poder gastar libremente bajo las estrictas regulaciones financieras de La Liga. Laporta y el presidente de la liga, Javier Tebas, siguen intercambiando golpes a través de los medios. Mientras tanto, parece que nadie sabe si el Barça realmente puede permitirse todos los grandes movimientos de dinero con los que supuestamente han estado coqueteando.

Ha pasado más de un año desde que Sergio Busquets se fue a Inter Miami, y el Barça todavía no ha encontrado una manera de reemplazarlo. Es cierto que no tenía sentido aferrarse a un mediocentro vetarano cuyas piernas ya no estaban al nivel de siempre. De hecho, fue mérito de Xavi sacar un último año de calidad de Sergio. Como sea, suplir a Busquets siempre iba a ser una tarea difícil.

Fallaron con Martin Zubimendi la temporada pasada y se conformaron con Oriol Romeu, quien parecía más bien un descarte del Southampton. Xavi terminó usando al defensa central Andreas Christensen como mediocampista defensivo, más como una solución temporal de emergencia que a largo plazo. Mirando al equipo, sigue siendo el área de mayor problema por abordar.

Sin embargo, el Barça se ha negado a hacerlo. Zubimendi reafirmó su compromiso con la Real Sociedad este verano, y en ese puesto no hay más rumores con sustento. En resumen, el Barça todavía no ha resuelto su problema más urgente.

El Barça tiene talento en varias áreas clave, pero no tienen un extremo izquierdo puro. Hansi Flick seguramente tendrá alguna solución allí, pero nadie en esta plantilla desequilibrada está en su mejor momento en la izquierda.

Ingresa Nico Williams. El extremo del Athletic Club fue uno de los mejores jugadores de La Liga la temporada pasada, y explotó en la Euro 2024. Con una rapidez impresionante, habilidoso con el balón y cada vez mejor como finalizador, el extremo - que tiene una buena relación con Lamine Yamal - parecía el refuerzo perfecto para una plantilla que necesitaba ayuda en la izquierda.

Los rumores de transferencia comenzaron durante la Euro, y nunca han parado realmente. Los jugadores del Barça han estado coqueteando públicamente con el jugador en redes sociales, e incluso no ocultaron que querían que él mostrara su fútbol en el Camp Nou. Pero parece que sus esfuerzos han sido en vano, ya que Williams, al igual que Zubimendi, ha comprometido su futuro con su club actual.

Una víctima de todo esto es Raphinha. El ex jugador del Leeds nunca ha tenido la oportunidad de asentarse en el Camp Nou. Primero bloqueado en el XI, luego utilizado en el lado equivocado del campo, y más tarde siendo objeto de constantes rumores de otros clubes, el brasileño todavía no ha logrado convencer en Catalunya.

Es injusto para el brasileño, que puede ofrecer una inmensa cantidad de calidad desde las bandas, y sin dudas puede ser un jugador determinante para un gran club en las circunstancias adecuadas. Aún así, parece que, una vez más, el Barça podría verse obligado a entrar en negociaciones para deshacerse de él.

Este es un equipo lleno de jóvenes talentos, pero con pocos activos realmente vendibles que puedan irse por un precio decente. Raphinha es uno de ellos. Una oferta por sus servicios podría superar fácilmente los €40 millones.

Nada de esto parece justo, especialmente para un verdadero talento que demostró ser lo suficientemente bueno como para ser titular en Brasil durante la Copa América, pero Raphinha podría estar en la rampa de salida.

Vitor, Roque podría ser la encarnación perfecta de esta tumultuosa era del club. El Barça estuvo vinculado con el brasileño durante meses, y a pesar de no tener aparentemente dinero para gastar, coqueteó con la idea de traer a 'Tigrinho'. Y finalmente lo hicieron, rechazando el jugador el interés del Arsenal y del Real Madrid. En teoría, parecía un buen movimiento. Robert Lewandowski estaba envejeciendo, y Roque tenía el tipo de talento para liderar la línea delantera del equipo azulgrana durante años.

Pero los meses después de su firma fueron inmensamente reveladores. Xavi apenas utilizó al adolescente, e hizo correr a Lewandowski hasta el cansancio. Y cuando Roque tuvo minutos, fue desplegado fuera de sy posición, o se le dio muy poco tiempo para hacer que las cosas funcionaran. Quedó claro que la leyenda del club no quería a Roque; su firma fue forzada por el director deportivo Deco. Y ahora, Roque podría estar en camino de salida, con el club supuestamente recibiendo ofertas por sus servicios de equipos sauditas y otros clubes europeos. Flick no lo quiere tampoco.

Sin embargo, a pesar de todo lo que está en su contra desde una perspectiva financiera, el Barca ha logrado aparentemente cerrar un acuerdo. Se dice que los culés están cerca de fichar a Dani Olmo. El héroe de la Euro 2024 ha sido rumoreado que está buscando una salida desde hace algún tiempo del RB Leipzig, y tendría sentido para él regresar a sus raíces en La Masia.

Lo que no cuadra, sin embargo, es la inmensa cantidad de dinero que se requeriría para alejarlo del equipo de la Bundesliga. Se dice que el RB Leipzig quiere un paquete que ascienda a €60 millones por sus servicios, algo que el Barca parece no poder permitirse.

Y más ampliamente, incluso si pudieran, Olmo no parece ser la persona adecuada para firmar. Un mediocampista ofensivo o falso nueve sería reforzar el único lugar del campo donde el Barca ya está bien. Ilkay Gundogan, Pedri, Gavi y Fermin Lopez pueden llenar ese rol admirablemente. Y aunque Olmo podría ser desplegado en la izquierda, sería un mal uso de su capacidad creativa.

Así pues, el Barca tiene poco margen de maniobra, y su gran apuesta en el mercado parece ser la persona equivocada. Sí, es un nuevo verano, pero los mismos problemas: la arrogancia y la mala gestión siguen proliferando dentro del club catalán.