En una charla reciente con France Football, Depay expresó: "El mundo es mucho más grande que solo Europa. A veces, en Europa se juega demasiado con la cabeza. Hay cada vez más reglas, equipos que priorizan el juego defensivo, que piensan demasiado… y eso, en ocasiones, mata el fútbol. Aquí, en cambio, nos divertimos y vivimos emociones puras con el verdadero fútbol.
Hay muchos jugadores muy fuertes, muy rápidos. Jugamos en condiciones de calor extremo. Tácticamente, hay margen de mejora, eso sí. Pero en todo lo demás, es un fútbol muy físico. Durante los noventa minutos hay espacios, el juego no se detiene. Es fútbol en estado puro: va de un lado a otro, a veces se desacelera y luego vuelve a explotar. Es complicado de describir, pero sin duda es algo muy distinto a lo que se vive en Europa.”