El inicio del Bayer Leverkusen bajo Erik ten Hag ha sido caótico. El empate 3-3 del sábado contra el Werder Bremen —en el que concedieron dos goles tardíos jugando con diez hombres— solo ha intensificado el descontento. Según informó kicker, el club ya albergaba dudas sobre el holandés antes de la segunda jornada, y desde entonces el ambiente en la BayArena se ha vuelto “crítico”. En medio de esta especulación, ni el director deportivo Simon Rolfes ni la directiva han mostrado respaldo público hacia Ten Hag.