De vuelta en Portugal, la frustración de los aficionados ha ido en aumento después de un primer año decepcionante bajo el presidente del club Villas-Boas. El Porto terminó cuarto en la Primeira Liga, cambió de entrenador a mitad de temporada por primera vez desde 2015-16 y fue eliminado de la Europa League en la ronda de playoff.
Otra salida temprana de la competencia internacional resultó ser el punto de quiebre para los aficionados, quienes lanzaron insultos y exigieron la dimisión del presidente del club.