La fricción entre el Athletic y el Barcelona ha crecido significativamente en los últimos años. El intento del Barcelona de fichar a Williams también ha encontrado resistencia por parte de la jerarquía del club. Los directivos del lado vasco han cuestionado la legalidad del traspaso bajo las regulaciones financieras de La Liga, en particular la regla de gasto "1:1". Argumentan que Barcelona está violando estas reglas y han amenazado con desafiar formalmente el acuerdo. Añadiendo leña al fuego, el presidente de La Liga, Javier Tebas, ha hecho eco de las preocupaciones del Athletic, sugiriendo que el Barcelona podría no estar cumpliendo con las restricciones del fair play financiero. Sin embargo, el presidente del Barcelona, Joan Laporta, desestimó esas afirmaciones, emitiendo una respuesta desafiante el viernes e insiste en que el club seguirá adelante como estaba planeado.