Wilmar Barrios llegó a Boca a mediados de 2016, junto con Sebastián Pérez. Sin tanto cartel como su compatriota, que venía de ser campeón de la Copa Libertadores con Atlético Nacional, el volante era señalado por quienes lo conocían como un jugador con las características necesarias para triunfar en el Xeneize. Dos años después, el cafetero se transformó en un símbolo del equipo de Guillermo Barros Schelotto: irremplazable en el Xeneize, también se ganó su lugar en la Selección Colombia en el Mundial y, lógicamente, el interés de los clubes europeos.
Si todavía no emigró al Viejo Continente, es solo porque el club pudo convencerlo de que se quede estos seis meses a pelear la Copa Libertadores. Renovación contractual y actualización de su cláusula y su salario de por medio, los hinchas pueden disfrutar del mediocampista un tiempo más. Aunque el reloj corre: en diciembre, o más tardar en junio de 2019, el colombiano armará las valijas. ¿Su destino? Everton es el mayor interesado, pero ofertas sobran.
El horizonte no está tan lejos y, por eso, el cuerpo técnico y la dirigencia ya se mueven para encontrar al sustituto de quien no tiene sustituto. Y el nombre que se escucha por estas horas sería el de Christian Oliva, quien se destaca en Nacional de Montevideo. Con 22 años, el uruguayo debutó en Primera de manera oficial el 22 de enero de 2018, ante Peñarol, por la Supercopa Uruguaya. A partir de allí, se convirtió en una fija entre los futbolistas que suele utilizar Alexander Medina: el DT ya lo conocía de la Reserva, donde era su capitán.
Lleva disputados 35 partidos en lo que va del año, de los cuales en 33 fue titular. Convirtió tres goles, dos por el certamen local y uno por la Libertadores, ante Santos en Brasil (fue derrota 3-1). Los otros fueron ante Boston River y Liverpool. ¿La particularidad? Fueron remates desde larga distancia, lo que demuestra su gran pegada.
Toto, como le dicen en Uruguay, juega de "doble cinco" junto a Santiago Romero y son sus cualidades mixtas la que lo destacan sobre el resto. Aunque no es un quitador nato como Barrios, puede cumplir esa función, mientras que también tiene buen manejo de pelota y pasa bastante al ataque, similar a lo que puede hacer Nahitan Nández.
