Una fecha FIFA más se aproxima en el Estadio Azteca y la posibilidad de escuchar de nuevo el famoso grito que busca erradicar el organismo de futbol está latente. Panamá pisará el Coloso de Santa Úrsula y la Federación Mexicana teme una probable sanción por las acciones de la afición.
Este 14 de octubre, se llevó a cabo el primer encuentro en el cual el árbitro central detiene las acciones por racismo. En el juego entre Bulgaria e Inglaterra, Raheem Sterling fue insultado por diversos aficionados. El colegiado sacó del estadio a este sector del público y reanudó las acciones posteriormente.
Sin embargo, la situación puede escalar a mayores niveles. En caso de reincidir, el árbitro puede detener el encuentro y mandar a los jugadores a los vestidores. Él decidirá si reanuda el partido o lo suspende para jugarlo después a puerta cerrada.
Toda selección puede sufrir la sanción más fuerte: quedarse sin Mundial. Por ello, la Femexfut busca erradicar dicho grito de sus estadios cuanto antes para evitar el controversial castigo.
LA HISTORIA
De acuerdo a diferentes reportes, el grito se inició en Guadalajara contra Oswaldo Sánchez, luego de que fichara con las Chivas proveniente del América. Este fue emitido por aficionados del Atlas de México. En el mismo sentido, fue en el Mundial del 2006 cuando este se dio por parte de seguidores de la Selección Mexicana.
Fue durante el partido entre México y Alemania del Mundial de Rusia 2018 cuando se dio la última sanción a la FMF, esta de 20 mil 500 dólares. Incluso han pagado cerca de dos millones de dólares por las multas. Por más que han intentado erradicarlo, la Federación encabezada por Yon de Luisa no ha conseguido desaparecerlo.
¿CÓMO CONTRARRESTARLO?
Muchos han sido los intentos por parte de la Federación Mexicana de Fútbol para detener el grito que la FIFA considera como homofóbico. Desafortunadamente, estos no han dado resultados y la afición sigue gritando al momento del despeje del arquero rival.
Recientemente, publicaron un vídeo en el cual muestran a jugadores y periodistas solicitando que detengan este accionar. Además, en los partidos de la Liga MX el sonido local emite una porra que trata de opacar el grito, pero éste tiende a ser más fuerte.
