En el vestuario del Real Madrid tienen la sensación, en base a lo que perciben en el día a día, de que Zidane no seguirá la próxima temporada. El contrato del francés con el club blanco es hasta 2022, pero como ya demostró tanto de futbolista como en su primera etapa de entrenador, ese detalle no es definitivo en sus hojas de ruta.
Goal ha consultado a diferentes jugadores de distinto rango en la caseta y la creencia general es la de que Zizou no continuará, misma idea que la transmitida por los entornos de varios de los integrantes de la plantilla. Le ven cansado, en ocasiones incluso molesto, por todo lo que se viene arrastrando desde septiembre: el calendario, la plaga de lesiones, las críticas... Es un pensamiento extendido y que precede a la eliminación en la Champions. Además, algunos pesos pesados, como Marcelo e Isco, se sienten muy decepcionados con su situación, la de dos antiguos referentes que han ido perdiendo importancia desde el regreso al banquillo del que fuera su valedor.
El cansancio de Zidane
Una persona cercana al técnico explica que al marsellés le hastía la rutina que se vive desde hace poco más de un año en el fútbol. A Zidane le encanta ir a Valdebebas, las sesiones con sus futbolistas, pero los protocolos a los que obliga el coronavirus le ha quitado esa esencia que disfrutaba al máximo de la vida de un equipo que ahora, en cambio, encadena test y más test, se tiene que duchar en sus domicilios, etc.
El Real Madrid duda de lo que hará Zizou
En el club tampoco ponen la mano en el fuego por que Zizou sea la cabeza visible del proyecto en la 2021-22. Pese a que se le consulta la planificación, cada vez extrañan menos sus constantes evasivas cuando es preguntado en rueda de prensa sobre su futuro. Aunque en cualquier caso se respetará su elección, el deseo es que se quede, para lo que ayudaría que se consiga por fin el fichaje de Mbappé, en el que Zidane ha trabajado mucho.
Próximos partidos
Una de las alternativas que se contemplan es la de Raúl. Su identificación con los valores del club, su calado en la afición y su evolución con el Juvenil A y el Castilla ilusionan en los despachos. También gustan Löw, que dejará de dirigir a Alemania cuando concluya la Eurocopa, y Allegri, actualmente libre. Son dos perfiles que siempre atrajeron a Florentino Pérez.
De fondo aparece un objetivo muy presente en Zidane, el de entrenar a Francia. Deschamps, salvo hecatombe o sorpresa en la Eurocopa de este verano, cumplirá su contrato y se marchará tras el Mundial de Qatar, en el invierno de 2022. A partir de ahí podría subirse al tren de su selección el Héroe de la Novena, que podría bajarse del madridista en unas semanas, según intuyen en su vestuario...