La polémica no podía faltar en un duelo de octavos de final de la UEFA Champions League entre el Real Madrid y el Manchester City. El árbitro Daniele Orsato tuvo un partido tranquilo hasta los últimos quince minutos cuando apareció la controversia.
La primera jugada protestada fue en el minuto 78 en la acción que supuso el 1-1 para el City y en la que Sergio Ramos pidió falta de Gabriel Jesús en el momento en el que el brasileño le ganó la posición para marcar. El brasileño firmó la igualada al cabecear un servicio de Kevin de Bruyne, le ganó el espacio tocando levemente la espalda de Sergio Ramos, el VAR lo revisó pero le dio validez.
Después, Orsato también señaló el claro penalti de Carvajal a Sterling que De Bruyne transformó en el 1-2 y acabó expulsando a Ramos por roja directa por un empujón sobre Gabriel Jesús cuando era el último hombre.