Con su regreso a la Champions League, el Marsella puede ofrecer a Endrick algo que pocos clubes garantizan: exposición, partidos de alta intensidad y, sobre todo, tiempo de juego. Esto es clave para un jugador que sueña con disputar el Mundial 2026 con Brasil. Tras lesionarse en los dos primeros partidos bajo Carlo Ancelotti con la selección, el joven de 18 años sabe que necesita más minutos para convencer al técnico italiano. Una condición fundamental es que el entrenador del Marsella, Roberto De Zerbi, le asegure una participación regular. Si todo se alinea, el Marsella podría lograr uno de los fichajes más destacados del verano.