El Real Madrid recibe este sábado al Valencia en el Santiago Bernabéu en un partido con una importancia vital de cara al título de La Liga después de perder en el Clásico. El equipo blanco ganó con mucha contundencia al Deportivo de La Coruña (2-6) en Riazor, demostrando que no se iba a descolgar de la carrera por la primera plaza, pero estando empatados a puntos con el Barcelona, no hay margen para el error. Y en el caso del Real Madrid, aún quedan dudas y suspicacias por haber sido derrotados en el Clásico pese a la reacción en Coruña.
Zidane fue uno de los mayores damnificados por el 2-3 ante el cuadro culé una semana atrás. Por la alineación de Gareth Bale, por las sustituciones, por la falta de calma tras lograr el 2-2 en los minutos finales. Las críticas han arreciado fuertemente contra el técnico galo estos días. Incluso la goleada ante el Deportivo sirvió para poner en duda su plan con los titulares y los suplentes. Y es por ello que en rueda de prensa este viernes, Zidane fue preguntado por su estado anímico.
La respuesta del galo fue nítida, cristalina: “Estoy de puta madre”. Sin más, con una sonrisa irónica en la cara. Pocas veces el francés ha perdido su rictus elegante y educado en rueda de prensa, tampoco lo ha hecho este viernes, ni siquiera jugándose La Liga, ni tras todas las críticas que ha recibido.
