LA INTRAHISTORIA
El Real Madrid conquistó este miércoles la Supercopa de España ante el Barcelona en el que es su segundo título de la presente temporada. Esto es, que jugadores como Theo Hernández, Jesús Vallejo, Dani Ceballos o Marcos Llorente pueden presumir de haber ganado dos títulos en sus primeros tres encuentros oficiales de blanco. Que no es poca cosa. Aunque eso sí, para alguno hay diferencias entre el título de la Supercopa de Europa y el de la Supercopa de España. Concretamente, para Theo Hernández.
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Y es que, en apenas una semana, el lateral zurdo -que debutó en partido oficial en el Santiago Bernabéu y está dejando muy buenas sensaciones este verano- varió la forma de celebrar un título y otro. O mejor dicho, la compañía con la que celebró una y otra Supercopa. Puesto que en Macedonia se le vio posar para la foto oficial junto a todos los jugadores españoles, mientras que este miércoles en el Santiago Bernabéu lo hizo con los jugadores extranjeros. Una simple anécdota pero que, tratándose de Theo Hernández, es un gesto poderosamente llamativo.
Ángel Martínez / realmadrid.com
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Puesto que el francés está en vías de tramitar su nacionalidad española para así poder ser seleccionable por La Roja, según pudo saber Goal. Theo es francés de nacimiento (Marsella), ha jugado en las categorías inferiores de Francia y de momento sólo seleccionable por Francia, pero lleva más de 10 años en España y su deseo es el de jugar con el combinado español y no el galo. Sin ir más lejos, este mismo verano no acudió al Mundial Sub-20 con Francia para poder jugar la final de Copa con el Alavés, y poco después tampoco se presentó a la concentración de Francia Sub-21 pese a estar convocado –trascendió que hubo un malentendido a la hora de comunicarle su convocatoria-. Circunstancias que han despertado suspicacias en el país vecino ante la posibilidad de que se les escape un jugador de la proyección de Theo. Medio francés, medio español, sin terminar de levantar la voz para clamar por una u otra opción y sin ninguna intención de generar ningún conflicto, haciendo gala de cierta discreción y un creciente sentido de la responsabilidad desde que llegó al Real Madrid. Pero también con multitud de gestos que hacen pensar no ya que Theo Hernández deambula entre dos aguas, sino que directamente le atrae más la zona al sur de los Pirineos aunque no lo haya verbalizado aún.
Y no sólo se trata de este juego de las diferencias en las celebraciones. Cabe recordar que en el vestuario merengue desde hace tiempo gustan de hacer esa división entre españoles y extranjeros, como a la hora de posar con los trofeos. Sin ninguna animadversión de por medio, ni mucho menos. Por cuestiones de idioma, de círculos de amistad y cercanía por nacionalidad, y por simple e inocente juego de rivalidad de un bando frente a otro. Sin más. Y por ejemplo a la hora de dividirse para los dos rondos que inician cada entrenamiento, en uno están los españoles (junto con Toni Kroos), y en el otro están los extranjeros. De forma que cada nueva pieza que entra en ese equipo sabe ya a qué rondo debe acudir sin que nadie tenga que decirle nada. Los últimos casos son los de Luca Zidane y Achraf Hakimi, que han estado este verano en el rondo (y en las celebraciones) de los extranjeros –son internacionales por Francia y Marruecos respectivamente-. Pero Theo está en el rondo de los españoles, sin ir más lejos. No es casualidad.
