El Real Madrid se ha llevado la Supercopa 2022 con todo el merecimiento ante un Athletic Club, que si bien no estuvo mal, apenas mostró razones para poder aspirar a discutirle el título al líder de LaLiga. Marcelino, como era de esperar, puso a su equipo a cerrar en la medida de lo posible el ataque el Madrid y confiando en que pudiera llegar algún zarpazo de los leones.
Los blancos fueron haciéndose dueños del encuentro y llegaban con facilidad al área rojiblanca, donde los de San Mamés acababan por resolver sin excesivos apuros. Hasta que media defensa se volcó en Rodrygo después de que recibiera un balón de Casemiro y el primero vio solo al borde del área a Modric que se inventó un excelente chut con rosca ante el que nada pudo hacer Unai Simón.
Era el minuto 38 y el castillo de naipes de Marcelino se venía abajo. Tanto que puso a calentar a Nico Williams para la segunda mitad.
TODO SOBRE EL REAL MADRID VS. ATHLETIC BILBAO DE LA SUPERCOPA DE ESPAÑA
La salida del pequño de los Williams parecía ser un acicate para la afición bilbaína pero apenas dio tiempo para ver si serviría para lograr el empate. Un penalti de Yeray por manos lo transformaba Karim Benzema y ponía el 2-0 en el marcador para que los blancos durmieran el resto del choque o al menos pudieran defender sin premura los vanos intentos del Athletic.
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Sin embargo, en el minuto 85 una pena máxima y la consiguiente expulsión de Militao por manos dejaba a Raúl García como el futbolista capaz de estrechar el resultado a falta de cinco minutos más el descuento. El centrocampista navarro marró el penalti, tirándolo por el centro ante lo que un Courtois casi batido fue capaz de reaccionar sacando el balón con el pie izquierdo. Era el final de un partido de dominio del Real Madrid, el indiscutible campeón de la Supercopa disputada en Arabia.