Monica SantinoMicaela Cannataro

"El amor por el fútbol no tiene género"

Levanta la cabeza, para la pelota, engancha y mete un pase entre líneas exquisito, de esos que despiertan un aplauso. "Mirá cómo la mueve la 10, parece un hombre", dicen desde afuera de la cancha y, a pesar de estar viendo un partido entre mujeres, recuerdan que para muchos el fútbol sigue siendo "cosa de hombres".

"Históricamente, el fútbol excluyó a las mujeres porque tiene una matriz masculina fuertísima", cuenta Mónica Santino, exjugadora, periodista deportiva, mamá, entrenadora y uno de los pilares de "La Nuestra", una organización que promueve el desarrollo del fútbol femenino y la igualdad a través de un espacio de entrenamiento deportivo y técnico para niñas y adolescentes en la Villa 31. Además de los trabajos físicos, La Nuestra propone un espacio de reflexión que permita profundizar en las problemáticas de las mujeres participantes.

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Monica Santino 06032017

Con todos estos laureles, Mónica aún debe soportar la pregunta que se la vea como un bicho raro, como "un marimacho", como si hubiera que buscarle una explicación a su pasión por la pelota siendo mujer. "El fútbol está muy arraigado a nuestra cultura y pretender que más de la mitad de la población está fuera de eso es querer tapar el sol con la mano", dice y recuerda cuando su equipo femenino de la Villa 31, Las Aliadas, comenzó a entrenarse en una de las canchitas del barrio: "Al principio no nos dejaban usar la cancha. Teníamos que pedir permiso porque era de los varones. Pero insistimos, primero ocupando un lugar, paradas en la mitad de cancha. Fuimos empujando a los pibes de a poco y en un momento no tuvieron más terreno. Ahora saben que hay días en las que nos toca usarla".

¿Por qué pelear por un lugar en dónde no te quieren? ¿Por qué no irse a jugar a otro lado? "Porque no sólo se trata de que las chicas jueguen al fútbol, se trata de que tomen sus decisiones con total libertadm que se sienta fuertes, queridas, apoyadas en todo momento. Una piba que practica puede patear, saltar, cabecear, compartir la cancha con el compañero varón tiene un cuerpo empoderado y es difícil que sea víctima de violencia de género".

Amor: "Sentimiento de afecto, inclinación y entrega a alguien o algo". 

Mónica intenta explicar que el fútbol no es sólo cosa de hombres y habla de un ADN de mujeres y de conquistas históricas. Dice que "donde hay una necesidad, hay un derecho" y cuenta que la lucha por la igualdad en el fútbol le dejó "heridas". Pero también habla de amor, de un "amor extraordinario por el juego, que es lo que nos une a varones y mujeres".

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