Un partido nunca puede ser el rasero para medir el desempeño de un equipo en una competición, sin embargo, lo que viene mostrando Colombia en su proceso de la mano de Carlos Queiroz comienza a ilusionar a la hinchada, que ve en la victoria sobre Argentina la muestra de que esta generación está para cosas más grandes.
Entender el planteamiento táctico de Carlos Queiroz, significa asimilar el echo de que Colombia ha dejado de especular para comenzar a ser un equipo que propone de comienzo a fin, sin complejos ni timidez.
La primera, y a lo mejor, la más dura prueba era enfrentar a la siempre favorita Argentina, luego de unos amistosos que prometían llevar a un seleccionado fuerte en ataque y con argumentos en defensa, pero que no eran garantía de una presentación importante en la Copa América.
Luego de un debut de ensueño, queda seguir concentrados, tabajando para mejorar lo mostrado en el primer encuentro de la competición, manteniendo la cabeza puesta en el día a día y sabiendo que cada rival viene a buscar la gloria. Argentina fue un inicio soñado, la ilusión está viva pero la realidad cambia partido a partido.
