Recientemente retirado del fútbol, Rodrigo Palacio ha decidido de momento reinventarse. A los 40 años, el argentino que disputó la final del Mundial Brasil 2014 ha decidido emprender un camino en el mundo del básquet.
Tras finalizar su última temporada en la Serie B con la camiseta del Brescia, el hombre de la trenza debutó con la camiseta del Garegnano, equipo que milita en el equipo de baloncesto de la Serie D lombarda.
Palacio participó en la semifinal de un torneo celebrado en Gaggiano, jugando y perdiendo 73-65 (4 puntos en su haber) ante el Basket Trezzano.
El argentino ha cultivado la pasión por el baloncesto desde que era un niño. Probablemente se inspiró en Manu Ginóbili, campeón de baloncesto argentino nacido como él en Bahía Blanca.
Los dos han tomado caminos distintos, llevándose sus respectivas satisfacciones en sus deportes. Ahora que Palacio ha probado suerte en el baloncesto, la pregunta es: ¿alguna vez veremos a Ginóbili jugar al fútbol?