Colo Colo jugó como copero avezado en el Castelao, pegó dos veces para silenciar a los que acababan de gritar campeones estaduales y respondió a su historia para establecerse con comodidades en su grupo de la Copa Libertadores, que lo ve liderar con River y mirar para abajo al Leao do Pici y Alianza, su siguiente rival en Santiago, donde tendrá que asumir la responsabilidad enorme de haber ganado en Brasil, una huella imborrable.
El resumen del Cacique y su triunfo en Fortaleza (1-2)
Desde el pitazo inicial del internacional uruguayo Cunha que el Cacique tiró encima su libreto: mover a Pablo Solari, Juan Martín Lucero y Gabriel Costa por todo el frente ofensivo con el fin de engañar de sobremanera la línea de tres local y saberse en igualdad de piernas en esa zona. Entre los desbordes y el desmarque del Pibe, llegó a su tanto el '36' en la primera pelota trascendental de Lucero desde la orilla, misma zona que lo vio celebrar con diagonal y tirazo a la escuadra. Todo se lo lanzó muy esquinado el gigante chileno a un 4º del Brasileirao que llenó la cancha y no se esperaba la presencia de Esteban Pavez, Maxi Falcón u el Torta Opazo.
Divulgação/CONMEBOLEl cambio de objetivo para el Colo se lo ha canjeado la segunda diana, puesto al oro que valían las unidades en el estado de Ceará no se podía renunciar. Quinteros bajó la intensidad pero mantuvo delanteros nacidos para mantener la acción lejos de un siempre brillante Brayan Cortés. Con Zaldivia la defensa creció en volumen, Renato Kayzer puso el único descuento y supo resistir fuerte el forastero pese a los accidentes de las postrimerías dícese roja de Emiliano Amor y palo de Marcelo Benevenuto. Los octavos ya son más posibles en el bálsamo del fútbol chileno que tanto sufre desde que se bajó de Qatar.
