Por delante tienen a dos bestias del arco. David De Gea y Thibaut Courtois son, probablemente, dos de los cinco mejores arqueros del mundo. Sus suplencias son comprensibles, pero llamativas en la FA Cup.
Sergio Romero, el dueño del arco de la Selección argentina desde hace ya 10 años, jugó cuatro partidos en este certamen, en el que se suele utilizar al portero suplente para darle rodaje. Fue protagonista de los 32avos, 16avos, octavos y cuartos de final. Pero para la semifinal Mourinho ya eligió ir con el español.
Wilfredo Caballero, convocado por Jorge Sampaoli para la lista de 35, tuvo un primer año en Chelsea como suplente del belga, aunque fue titular en toda la FA Cup: jugó los cinco partidos en el camino hacia la final, incluso siendo protagonista en una definición por penales.
Llegó el partido decisivo y se esperaba ver un duelo entre argentinos. Pero ambos entrenadores eligieron a sus porteros titulares: De Gea y Courtois estuvieron defendiendo sus arcos. Les dieron la responsabilidad de ser los arqueros durante todo el torneo, pero a la hora de definir el título optaron por el español y el belga, a menos de un mes del Mundial. Un golpe al estado anímico de los jugadores y a la confianza.
Finalmente el título quedó en manos de Chelsea. Fue 1-0 con un gol de penal de Hazard y con una buena actuación de Courtois. Los compañeros, igualmente, felicitaron a Caballero, reconociendo su rendimiento en el torneo.
