Jhon Viáfara Once CaldasGetty

El día que Viáfara se hizo en La Bombonera

Era la Copa Libertadores de 2004 y después de dejar en el camino a varios grandes del continente, Once Caldas viajó a Buenos Aires para jugar el partido de ida de la gran final ante el poderoso Boca de Carlos Bianchi.

Al elenco cafetero no sólo le tocó enfrentarse al último campeón sino a más de 50 mil personas que estaban en esa noche en La Bombonera. Algo nunca antes vivido por el cuadro que dirigía en su momento Luis Fernando Montoya.

Para nadie es un secreto el miedo que da jugar en La Bombonera y lo mal que la pasaron muchos equipos del continente. Ese día, el equipo no la pasó tan mal, sacó un 0-0 para poder definir tranquilo en su casa. Sólo un jugador, de Once Caldas, la pasó mal en el estadio de la calle Branden. 

Fue Jhon Viáfara, figura en el partido de vuelta, que no aguantó y le tocó hacerse encima durante el partido. Anécdota confirmada por el mismo entrenador y compañeros suyos como Arnulfo Valentierra. 

Ante la negativa del árbitro uruguayo, Gustavo Méndez, al volante colombiano le tocó hacer sus necesidades en pleno campo sin importarle como quedó después y lo mal que la pasaron los rivales gracias al olor.

En el entretiempo, Viáfara dejó el uniforme en el un tacho de basura y cuenta la leyenda que un utilero argentino, al servicio del Once Caldas, lo agarro y se lo llevó a la casa. Tremendo recuerdo y tremenda tarea a la persona que tuvo que lavarlo.

Una semana después, Once Caldas le dio la segunda Copa Libertadores a su país y Jhon Viáfara fue una de las figuras anotando un gol histórico. El volante dejó huella en ese equipo campeón y también en la cancha de Boca, donde muchos la pasaron mal. 

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