OPINIÓN
Real Madrid atraviesa su mejor momento en mucho tiempo. Con Zinedine Zidane, los blancos fueron los primeros en ganar dos veces seguidas la Champions League, y completaron un doblete histórico que el club no conseguía desde 1958. Esta temporada volverán a ser el equipo a vencer.
La pretemporada no arrancó bien en la International Champions Cup, donde incluso los capitalinos perdieron el Clásico ante el Barcelona. Pero se supieron reponer con el inicio de la competición oficial, ganando la Supercopa de Europa al Manchester United en Macedonia y dando un paso importante en la Supercopa de España. Ganaron 1-3 en el Camp Nou y deben coronar lo hecho en Barcelona este miércoles en el Bernabéu.
Mientras el Barcelona vio como el PSG se llevaba por 222 millones de euros a una de sus grandes estrellas, Neymar, el Real Madrid mantuvo su excelente plantilla y le agregó algunas incorporaciones.
Goal
El Madrid gastó 30 millones en Theo Hernandez, procedente del Atlético y de gran campaña pasada en el Alavés. La cláusula era de 24 millones, pero desembolsaron 6 más para no romper relaciones con sus vecinos de la capital. Theo tendrá que competir por un lugar con Marcelo, aunque podrían actuar los dos juntos en un hipotético 4-4-2.
El otro jugador que llegó en verano es Dani Ceballos, de gran Europeo Sub 21 y por quien se pagaron 17 millones de euros al Betis (15 de la cláusula y dos más para terminar en buenos términos con los andaluces). Allí también los merengues ganaron la batalla al Barcelona.
Los dos fichajes del Real Madrid habían estado relacionados con un traspaso al Camp Nou, pero acabaron eligiendo el Santiago Bernabéu.
Pero los campeones de Europa piensan también a futuro, y por eso contrataron a Vinicius Jr, delantero de 17 años del Flamengo, en 45 millones de euros.
Eso sí, el Real Madrid ha sufrido también la salida de algunas figuras. James Rodriguez se fue al Bayern Munich, Alvaro Morata partió con destino al Chelsea, Pepe se marchó al Besiktas y Danilo, al Manchester City. Otros que se fueron han sido Fabio Coentrao, Diego Llorente, Mariano y Burgui, pero no tenían casi participación en el primer equipo.
Zidane podrá contar con un Asensio cada vez más importante y con un Lucas Vázquez repleto de ilusiones. Gareth Bale empieza a volver de su lesión, en tanto que Isco crece a pasos agigantados. Ceballos le dará al técnico francés otra alternativa en una zona del campo en la que los merengues están más que cubiertos.
En defensa, Nacho y Jesus Vallejo, que regresa tras su cesión en el Eintracht Frankfurt, será una alternativa para Sergio Ramos y Raphael Varane. Al Real le haría falta un delantero más. Y todavía no está resuelto el futuro del joven atacante francés del Monaco Kylian Mbappe.
"Estoy feliz con la plantilla y con todos los jugadores", dijo Zidane el martes. "Se van a quedar todos. Como siempre digo, hasta el 31 de agosto puede pasar cualquier cosa, yo no lo controlo. Pero lo que les puedo decir es que estoy muy feliz con los jugadores que tengo".
Y debería estarlo, realmente. Porque con o sin un nuevo centrodelantero, su plantilla es la más fuerte de Europa, incluso mejor que la del Barcelona, cuyo banquillo no es lo suficientemente bueno. ¿Hay alguna duda de que son los grandes favoritos para volver a reinar en España y en el continente? Si la hubiera, Zidane ya avisó que sus futbolistas siguen teniendo hambre de gloria.