Luiz Felipe Scolari (Passo Fundo, 1950) es el entrenador que fueron a cerrar a Brasil los dirigentes de Blanco y Negro para sumarlo al proyecto Colo Colo 2020, que se deshizo temprano de Mario Salas por la mala campaña. Felipao, como es apodado, llegará a Chile con un sueldo cercano al millón y medio de dólares por cada una de las dos temporadas en las que estaría presente en caso de cuajar positivamente.
Siempre primer candidato, pero que corrió junto a Gustavo Alfaro, Martín Lasarte e incluso el tetracampeón con los albos Claudio Borghi, el ex adiestrador del Palmeiras fue un futbolista que apenas jugó ocho años (1973-1981) pero que apenas colgó los botines empezó una brillante carrera como DT que ya se extendió por 38 cursos y que acumuló 28 coronas de campeón... destacando la más importante de todas las que querría un grupo futbolístico.

Sin Emerson, al mando de la Verdeamarelha 'dividió' la jineta y más bien los liderazgos entre Cafú, Roque Júnior, Roberto Carlos, Rivaldo y Ronaldo y conquistó la Copa del Mundo de Corea Japón 2002 tras redondear una campaña perfecta: su equipo venció a Turquía (2-1), China (4-0) y Costa Rica (5-2) para clasificarse como líder de la Zona C, y luego en la ronda final dio cuenta de Bélgica (2-0), Inglaterra (2-1), Turquía (nuevamente, aunque 1-0) y Alemania (2-0) en Yokohama. Siete de siete y 18 goles a favor.
En esa definición, alineó un 3-4-1-2 con Marcos; Lúcio, Edmilson, Roque Júnior; Cafú, Gilberto Silva, Kléberson, Roberto Carlos; Ronaldinho; Ronaldo y Rivaldo. "Le copié a Bielsa", admitió.
Scolari ganó seis torneos regionales. Un alagoano con el Alagoano, tres Gaúchos con el Gremio, un Río-Sao Paulo con Palmeiras y una Copa Sul-Minas al mando de Cruzeiro. Nacionales conquistó la Copa Emir Kuwait con el Al-Qadsia, cuatro Copas de Brasil (Gremio, Palmeiras x 2 y Criciúma), dos Brasileiraos (con Gremio y Palmeiras -este último en 2018-), una Liga uzbeka con el Bunyodkor, tres Superligas chinas con Guangzhou Evergrande, conjunto con el que celebró en otras dos Supercopas chinas y una Copa China.
El palmarés internacional es igual de gordo. Levantó dos veces la Copa Libertadores, con el Gremio 1995 y el Palmeiras 1999, además de una Recopa Sudamericana con Gremio y una Mercosur con el Verdao y una Liga de Campeones asiática con el Guangzhou. A nivel de selecciones cierra el consignado Mundial con Brasil en 2002, la Copa Confederaciones de 2013 también con los pentacampeones y una Copa de Naciones del Golfo cuando dirigía a Kuwait.

A nivel personal, en los últimos días le recordaron su "también hizo cosas buenas" en alusión al dictador chileno Augusto Pinochet y la lista de instituciones con las que no pudo tocar la glotia también son bastantes. No pudo ser campeón con el Juventude, Al-Shabab, Pelotas, Goias, Coritiba, Al-Ahli, Júbilo Iwata, Portugal (aunque los clasificó a Alemania 2006 y salió cuarto) y Chelsea. Su última experiencia al mando del Scratch culminó abruptamente con el 1-7 a manos de Alemania en casa y la pérdida incluso de la medalla de bronce ante Holanda.

Al mando de Palmeiras, el hombre que buscó el Cacique para salir de la crisis implantó un 4-2-3-1 que alcanzó 80 puntos en el Brasileirao de 2018, por sobre los 72 de un Flamengo que un año después tocaría el cielo del continente. En el duelo final de esa temporada, frente al Vitoria, optó por Weverton; Mayke, Antonio Carlos, Edu Dracena, Victor Luis; Felipe Melo, Bruno Henrique; Gustavo scarpa, Lucas Lima, Dudu; y Miguel Borja. En aquel plantel eran claves también Willian y Marcos Rocha. ¿Qué sistema implantará en Chile? En ese último consignado es en el que viene confiando en sus más recientes experiencias en un banco. Big Phil. Un campeón de siempre para el Eterno Campeón.


