Marcus Thuram no sufre el peso de su apellido. El delantero del Borussia Monchengladbach tiene 25 años y es es una de las promesas más destacadas de la Bundesliga y el referente de uno de los equipos más importantes del fútbol alemán.
Una infancia entre estrellas
Como sospechan, Marcus es el hijo del ex defensa de Mónaco, Parma, Juventus y Barcelona. Marcus Thuram nació en Italia cuando su padre estaba jugando en el Parma con Gianluigi Buffon y Fabio Cannavaro y concreramente es su hijo mayor, pero no se parece demasiado a él, ya que juega delantero y su padre lo hacía como central (sólo marcó 15 veces en una carrera de 825 partidos).
Las botas de Messi que regaló
Cuando Lilian jugaba en el Barcelona, Marcus explicó que uno de los "amigos" de su padre fue tan amable que le regaló un par de botas.
Este "amigo" era Lionel Messi, que entonces tenía sólo 20 años: "Me quedé despreocupado en ese entonces, era un niño de 10 años, y él tenía 20", dijo Marcus a la "AFP". "Sus botas eran muy pequeñas para mí, así que se las regalé a un amigo, ¡las debe tener todavía!".
"Veía a Messi, veía a los jugadores con los que mi padre jugaba, pero para mí era gente del día a día, no me daba cuenta. Y un amigo del fútbol, que sí veía las cosas, estaba obsesionado por aquellas botas. Me insistió y me insistió, al final se las regalé", revelaba.
Sochaux y Guimgamp, sus trampolines en Francia
Su apellido era una carga muy pesada. Era el hijo de uno de los campeones del mundo del '98 y, ya de vuelta en Francia, siguió su carrera formativa en la cantera del Sochaux, donde llegó con 15 años como recomendación de su padre.
"Sochaux está muy lejos de todo, no hay mucha presión de los medios, es una burbuja de protección. ¡Fue mi padre quien me dijo que me fuera!", decía Marcus a "L'Equipe".
En la cantera del Sochaux, una de las más renombradas de Francia, empezó a destacar y llegó a la selección de Francia Sub-17 para luego jugar en la Sub 20 hasta debutar como profesional en marzo de 2015 con apenas 18 años.
Su primer gol fue contra el Lyon, de cabeza. La celebración fue fiel al estilo familiar, levantando la mano en su boca en una actitud pensativa, tal como lo hizo su padre Lilian cuando marcó dos goles para Francia en la semifinal del Mundial 1998 contra Croacia, la única vez en la que marcó para su selección en 142 partidos.
De allí se marchó al Guigamp, donde en dos temporadas en la Ligue 1 marcó 17 goles en 72 partidos y terminó de asentarse en la élite para llamar la atención del Borussia Monchengldbach, un club que se ha especializado en reclutar jóvenes talentos.
Brillando fuera y dentro del campo en Alemania
Getty ImagesEl club alemán pagó en 2019 y en su primera temporada anotó 14 goles y repartió 9 asistencias en 39 partidos, teniendo un papel decisivo para que el Gladbach volviera a disputar la UEFA Champions League. Sus números comenzaron a ir a más año tras año.
Thuram, que fue el último convocado por Deschamps para la Copa del Mundo, no marcó goles en sus 4 partidos en el Mundial (67') pero dio una asistencia. En la actual temporada de la Bundesliga, acumula 10 goles y 3 asistencias en 15 partidos, además de 3 goles y una asistencia en 2 partidos de la Copa de Alemania.
Podría jugar la final por Giroud
Ahora, es una de las amenazas de la Selección Argentina en la final del Mundial de Qatar 2022, pues podría reemplazar al 'tocado' Olivier Giroud. El jugador del Milan tiene molestias y el punta de Borussia Monchengldbach podría salir en el once inicial de Didier Deschamps.
Además, Marcus Thuram también está brillando fuera del campo por su compromiso en la lucha contra el racismo. En su día dio la vuelta al mundo su celebración tras la trágica y polémica muerte de George Floyd, un afroestadounidense de 46 años brutalmente asesinado por Derek Chauvin, después de ser arrestado por la policía en Minneapolis e incluso la FIFA pisió que no se le sancionase. No en vano sus padres le pusieron su nombre para honrar al activista de derechos civiles Marcus Garvey.