Problemas en el FC Barcelona a 10 días del Clásico con el Real Madrid: Joan Laporta, presidente de la entidad, ha sido imputado por cohecho en el 'caso Negreira'.
La noticia sacude Can Barça a poco más de una semana de recibir al conjunto blanco en el partido más importante del equipo en este inicio de campaña, con el juez del Caso Negreira habiendo decidido extender la condición de investigado a Laporta, y tambiéna todos los miembros de su junta directiva durante su primer mandato por los pagos efectuados al que fuera vicepresidente del Comité Técnico de Árbitros, Enríquez Negreira, y a su hijo.
Delito continuado de cohecho, de corrupción deportiva, un delito continuado de administración desleal y de falsedad en documento mercantil son algunos de los cargos que se le imputan. Además, se atribuye esta misma condición de investigados a todas las personas denunciadas inicialmente por la Fiscalía, como la familia Negreira, los expresidente Josep María Bartomeu y Sandro Rosell y los exdirectivos Óscar Grau y Albert Soler.
Joaquín Aguirre, titular del juzgado de instrucción número 1 de Barcelona,ha incorporado en este nuevo auto a Joan Laporta entre los imputados, pese a que la Fiscalía en un primer momento no le incluyeseal entender que los posibles delitos cometidos durante su primer mandato ya habrían prescrito.El magistrado Aguirre discrepa en este nuevo texto al considerar que las consecuencias penales sí le permiten imputarlo debido a que se trata de un delito continuado de cohecho.
El magistrado reafirma que el exvicepresidente del CTA tenía “un ámbito de influencia muy amplio” al ser el segundo en el escalón de ese colectivo. Y agrega: “Por deducción lógica, los pagos realizados por el FC Barcelona satisfacían los intereses del club en atención a su duración y al incremento anual. De aquí se deduce también, quelos pagos produjeron los efectos arbitrales deseados por el Barcelona, de tal manera que debió existir una desigualdad en el trato con otros equipos y la consiguiente corrupción sistémica en el conjunto del arbitraje español,lo cual no significa que todos y cada uno de los árbitros fueran corruptos, pero sí un grupo de ellos”.


