El Barcelona se ha quedado en cuadro tras la espantada de Arthur Melo, que no regresará a Barcelona para ponerse a disposición de Quique Setién durante la Champions League. El cántabro ya sabe que no podrá contar con los sancionados Sergio Busquets y Arturo Vidal y el concurso del brasileño cotizaba al alza debido a que los únicos centrocampistas del primer equipo disponibles son Frenkie De Jong, Sergi Roberto e Ivan Rakitic.
Setién espera recuperar a Griezmann pero no a Dembélé
La situación es más grave ampliando el foco en las demás líneas. En defensa Samuel Umtiti no está ni se le espera y en ataque Ousmane Dembélé tampoco llegará a tiempo para jugar ante el Napoli. El francés ya ha empezado a realizar trabajo de campo pero tras seis meses lesionado debido a una recaída toda precaución es poca para con él, especialmente teniendo en cuenta su historial de infortunios.
Sí estará, en cambio, un Antoine Griezmann que ya se ha reincorporado a la rutina diaria después de superar una lesión muscular. Cabe recordar cómo un gol del ex del Atlético salvó al Barcelona de la derrota en el San Paolo del mes de febrero. De todas formas, hasta que su recuperación sea un hecho Setién trabaja con sólo once futbolistas de campo pensando en el partido de vuelta de los octavos de la Champions League del 8 de agosto.
Ansu y Riqui deben ser clave; Araújo, duda
La buena noticia es la progresión de Ansu Fati y Riqui Puig, cada vez más consolidados como recursos efectivos. Ambos acabaron LaLiga como un tiro y si Setién insistió en que no disputaran el play-off de ascenso a Segunda División fue porque sabe que irá a la competición con menos del mínimo exigible, no en vano la promoción de ascenso devolvió a Ronald Araújo lesionado, por lo que el central uruguayo está también prácticamente descartado para recibir al Napoli. Sólo la recuperación de Griezmann y la presencia de Ansu y Riqui permitirá al técnico disponer de catorce futbolistas de nivel para aspirar a la sexta corona europea del Barcelona.
