OPINIÓN
Arda Turan es el único jugador de la plantilla del Barcelona que todavía no ha jugado ningún minuto esta temporada, junto a Rafinha, que tiene una buena excusa ya que ha estado lesionado desde abril. Incluso Thomas Vermaelen ha jugado más que Turan esta temporada. Estos datos demuestran la nula confianza que tiene Ernesto Valverde en el futbolista turco.
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Sin embargo, cada vez que el técnico catalán Ernesto Valverde es interrogado al respecto en una conferencia de prensa, saca su respuesta genérica de las circunstancias: "Cuento con todos mis jugadores".
¿Por qué no cuenta Valverde con Turan? ¿Cómo llegó Turan al club?
Turan llegó a ‘Can Barça’ por mediación de Luis Enrique, quien vio en el ex del Atlético de Madrid un heredero de Xavi Hernández, a pesar de tener ambos perfiles muy diferentes. Además, el centrocampista turco había cuajado buenas actuaciones contra los azulgranas, por lo que fue elegido por Bartomeu como refuerzo a su candidatura electoral.
El jugador, cuya clase es indiscutible así como su indiferencia en ciertos momentos, necesitaba cambiar de aires y dejar al Atlético de Simeone, muy solidario y en el que debía trabajar continuamente, para seguir floreciendo en un Barcelona más técnico.
Getty ImagesEn todo este tiempo apenas ha brillado, como tampoco ha logrado aprender el idioma u ofrecer unas declaraciones a la prensa en sus siete años en España, aunque sí goza de una buena sintonía con los pesos pesados del vestuario culé, especialmente con Piqué.
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Lo que lo distingue a Turan de otros fracasos azulgranas es que él es capaz de hacer grandes cosas con un enorme potencial técnico y un buen bagaje táctico adquirido dentro de un muy rígido Atlético de Madrid. Pero muestra una flagrante ausencia de ambición y de motivación, además de un mejorable estado físico.
Turan es perfectamente complaciente en su papel actual y por una razón muy simple: cuenta con un salario generoso difícil de igualar por otros clubes. Además, su cotización en el mercado turco, que es donde todavía cuenta con caché, decreció, al igual que su popularidad, tras el incidente protagonizado el pasado junio con un periodista local.
Todos estos elementos explican la falta de entusiasmo del jugador de 30 años de edad que está disfrutando plenamente de su vida en una bella ciudad como Barcelona, con un buen sueldo, en uno de los mejores clubes del mundo, viviendo su particular ‘Dolce Vita’.