Erling Haaland, no podía ser otro. La estrella futbolística por la que pelean todos los grandes, fue el encargado de marcar el primer gol de la Bundesliga y ampliar su espectacular cuenta en su vuelta tras 66 días por el parón debido al coronavirus. El noruego anotó, pero como aconsejan las medidas sanitarias, no se abrazó con los compañeros para festejar el primer tanto del encuentro. Haaland, pretendido por el Real Madrid y recientemente elogiado por la layenda alemana Lothar Mattäus, marcó un precioso gol al primer toque.
Una buena jugada del Dortmund con pase de espaldas de Brandt acabó en Hazard quien envió al área donde apareció Haaland para marcar con su zurda e inaugurar el casillero en el derbi de la Cuenca del Ruhr entre Borussia Dortmund y Schalke. Naturalmente, el partido se jugó a puerta cerrada, sin presencia de público, como exigían las normas sanitarias.
Sin duda, Halaand, no decepcionó a los miles de aficionados que pudieron seguir, en directo, el primer partido del regreso de la Bundesliga. Además, asistió en el cuarto en el triunfo del Dortmund ante el Schalke (4-0). Y es que el noruego va a estar en la pelea por ver quién es el máximo goleador del campeonato, junto a cracks como Lewandowski, uno de los máximos goleadores históricos de la Bundesliga, o Timo Werner.
