La lista de candidatos a dirigir la Selección argentina, hoy por hoy, está vacía . Luego de que Diego Simeone, Marcelo Gallardo y Mauricio Pochettino dejaran en claro públicamente que no tienen la menor intención de hacerse cargo de la devaluada Albiceleste, ahora el que cerró las puertas a su potencial regreso fue Gerardo Martino, quien había dirigido al equipo entre 2014 y 2016 y se había ido hastiado de los desmanejos dirigenciales.
El Tata, quien decidió renunciar antes de los Juegos Olímpicos de 2016 ante la negativa de los clubes a cederle futbolistas para el torneo, fue tajante: "Que se haya dado un hecho como el de la semana pasada con los futbolistas que tenían que ir a la Selección me recuerda a lo de los Juegos Olímpicos. Yo tomé una decisión en ese entonces por ese hecho y dos años después se vuelve a repetir, entonces pienso que ha cambiado muy poco, y puedo creer que está peor".
En una entrevista con el periodista Daniel Arcucci, el DT de Atlanta United explicó: "No veo que hayan cambiado demasiado las cosas. Desde lejos, se nota peor. Es muy cansador escuchar a mucha gente -jugadores, periodistas, dirigentes, entrenadores- salir permanentemente en los medios a pedir un cambio y notar que esas mismas personas hacen muy poco para que todo cambie".