River Boca Superliga 05112017EITAN ABRAMOVICH/AFP/Getty Images

Enzo Pérez jugó el Superclásico con el alma y algo más

Enzo Pérez llegó a River decidido a cumplir su sueño de jugar como hincha y en su primer Superclásico lo demostró. El mendocino, que llegaba entre algodones luego de molestias originadas en la derrota ante Lanús, puso en la balanza la camiseta con la banda roja y no pensó ni un minuto en la convocatoria de Jorge Sampaoli para la gira de la Selección argentina en Rusia.

Difícil quedarse con un momento suyo en el duelo ante Boca, porque fue protagonista en distintos pasajes y situaciones de todo tipo. Se puso al frente de los reclamos contra Pitana, le "robó" una expulsión a Edwin Cardona, salvó dos veces el arco de Lux cuando el Xeneize quería sentenciar el partido, pidió la pelota para ir para adelante y terminó extenuado y dolorido, obligando a Gallardo a reemplazarlo.

Muchos se quedarán con el ya histórico "inventaron el VAR", contra el árbitro principal, sus colaboradores y Germán Delfino, terminado el primer tiempo luego de la justificadísima expulsión de Nacho Fernández. Pero lo cierto es que River salió a jugar el segundo tiempo, en desventaja numérica, con una actitud totalmente distinta y dispuesto a llegar a la igualdad, incluso fingiendo un codazo del 10 colombiano para quedar nuevamente equiparados.

El artículo sigue a continuación

Otros elegirán su última participación: un contragolpe con mayoría de jugadores de Boca, Fabra listo para rematar por izquierda y un cruce "a lo Mascherano" para trabar y llevarse la pelota. Minutos después, el Muñeco decidió su salida bajo una merecida ovación, por ser (junto a Ponzio) lo que significa jugar un clásico. 

Anuncios