Se preveía un duelo igualado de equipos con realidades similares y tanto el Huesca como el Fuenlabrada lo llevaron hasta el extremo en un partido aburrido y sin incidencia de ningún tipo.
Ha sido un partido con muy escasas ocasiones en el que los delanteros no han puesto apenas a prueba a los guardametas, que como los espectadores asistían al juego embarullado y sin soluciones de los contendientes. Lo intentaron con los cambios pertinentes en la segunda mitad pero cambiaron mucho para que todo acabara siguiendo igual. Aragoneses y madrileños quedan en la mitad de la tabla con 7 puntos en ambos casos.