EDITORIAL
Hay exceso de efectivos en la zona ancha del Barcelona. Ernesto Valverde tiene a sus órdenes en estos momentos a seis jugadores, Sergio Busquets, Ivan Rakitic y Frenkie De Jong, todos ellos con un lugar garantizado en el equipo, además de Sergi Roberto, Rafinha Alcántara y Carles Aleñá. A ellos se unirán a partir de la semana que viene los internacionales sudamericanos, Arthur Melo, Arturo Vidal y Philippe Coutinho. Al entrenador le gustan las plantillas cortas para poder dar minutos a todos sus jugadores y el club busca desde hace semanas salidas satisfactorias de algunos de estos centrocampistas.
Es el caso de Rafinha, pendiente del interés de un Valencia que no piensa llegar hasta los quince millones que pretende ingresar el club azulgrana a falta de un año para que concluya su contrato. En las últimas horas habría irrumpido la Fiorentina aunque el Barcelona ha admitido recientemente no haber recibido oferta alguna para traspasar al brasileño, que regresó a los terrenos de juego el pasado martes ante el Chelsea después de ocho meses recuperándose de una grave lesión. De momento, y a la espera de que se concrete propuesta alguna, Rafinha ejerció de extremo derecho en la derrota ante el cuadro inglés.
Titubea también el futuro de Coutinho en el Camp Nou. Desde hace meses son varias las voces en la junta directiva que ven con buenos ojos la salida del brasileño, quien públicamente siempre ha manifestado su deseo de seguir. No será de cualquier manera, pues a pesar de haber vivido una temporada irregular, es evidente que su marcha debilitaría al equipo a menos que llegara uno mejor. Es decir, que su salida está condicionada a la llegada de Neymar Da Silva, algo improbable pero no imposible.
La próxima semana Valverde recuperará a los internacionales que disputaron la Copa América y se pondrá a trabajar con la plantilla al completo. Será entonces cuando la comisión deportiva tomará las decisiones pertinentes para aligerar la nómina en el centro del campo, sin olvidar que también Riqui Puig, Álex Collado y Oriol Busquets piden paso desde el filial. La zona media tomará especial relevancia esta temporada. Antes tocará ajustarla al máximo, no obstante.
