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El 'Gato' Benzema se comió a los once leones

OPINIÓN

El Real Madrid dio este domingo una alegría a los suyos con una victoria holgada ante el Athletic (3-0), cimentada en una aseada segunda parte a la que Benzema dio lustre. El francés firmó un ‘hat-trick’, confirmando así un estado de gracia que quizás no se había visto nunca por el Santiago Bernabéu en la última década. Y ya es decir. Son 30 goles en lo que va de temporada, marcando en todos y cada uno de los últimos encuentros. En tiempos donde muchos jugadores piensan ya en la próxima temporada, el ‘9’ no se cansa de reivindicarse y dar la cara por el Real Madrid. Capitán, en el sentido máximo de la expresión.

La primera parte del Real Madrid ante el Athletic, eso sí, fue como las de los últimos partidos. Esto es, con los blancos compareciendo únicamente tras el paso por el vestuario al descanso. La falta de motivación actual, sin títulos por los que pelear, es tan latente que los blancos sólo reaccionan cuando le ven las orejas al lobo. O al león, en este caso. El Athletic, serio y en una buena dinámica, no sufrió apenas durante toda la primera parte. O por lo menos, no sufrió más que el espectador -fuera del equipo que fuera-, incapaz de arrancarse a aplaudir en ninguna acción durante los primeros tres cuartos de hora de partido.

Tuvo que ser, otra vez más, Benzema el que levantara el partido para los blancos. El francés no sólo es el mejor jugador del Real Madrid esta temporada, sino uno de los mejores del momento actual. Lástima que, sin nada en juego, le luzca tan poco. Porque, eso sí, le sale todo lo que intenta. Como el Rey Midas, lo que pasa por sus botas lo convierte en oro. Ante el Athletic marcó los tres  goles que valieron los tres puntos, dejando la sensación de haber estado por encima de los veintiún futbolistas que le rodeaban. Un solo ‘gato’ arañó mucho más que once ‘leones’.

El primer gol blanco llegó a los dos minutos de la reanudación, haciendo buena la enésima ‘Zinedina’ al paso por vestuarios. De cabeza a centro de Asensio. Como también fue con la testa el segundo gol, esta vez al saque de un córner que Herrerín no acertó a despejar. El último, ya casi en el descuento, llegó desde 35 metros con el meta visitante fuera de su portería. El balance es demoledor a favor del galo: ha anotado él solo los últimos ocho goles del Real Madrid, y ha participado en trece de los últimos quince, contando también con cinco asistencias. A día de hoy, Benzema es la corona, la banda azul y las letras doradas del escudo madridista. 

Con la victoria en el saco y 2-0 en el marcador, Zidane dio minutos a Brahim, que una vez más dejó al espectador con ganas de ver un poco más de él. Al contrario que con Gareth Bale, suplente de nuevo y pitado desde el mismo momento en el que pisó el césped del Bernabéu. El respetable no le soporta ya más. Casi en el descuento pudo haber marcado en un mano a mano con Herrerín, pero el galés no levanta ya cabeza. A la hinchada tampoco le preocupa mientras no siga en la plantilla la próxima temporada. Cuanto más se enamora de Benzema, más se despega de Gareth Bale. Alfa y omega de la extinta BBC.

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